La causa de los tres comentarios anteriores creo que es "palpable", ¿a quien le hacía daño esta "joya de la naturaleza"?. La verdad es que ya no está, ahora habrá mil razones, aunque yo creo que ninguna llegará a convencerme.
Quizás, estorbaba. No lo creo.
Quizás las raices se metieran en la cochera de alguno.
Quizás, algún sabio de la construcción y urbanización, de forma autónoma o mandado, tomara la decisión, quizás...
A este álamo negro lo alcanzó un rayo, según me contó Diego "el Barbero", q. e. p. d.; cuando una culebrilla impactó en la
fachada de su
casa y buscó la salida por la
ventana de atrás hasta darle de lleno al
árbol. Él se previno subiéndose al sillón ¿de baquelita? de peluquero. Parece ser, que ese
... (ver texto completo)