A algunos mensajes, que recibo por correo los califico como no deseados (SPAM).
Bueno, pues "Francisquillo" es un "spasmo" que siempre quiere estar allá donde no le llaman ni le concierne, "pobrecillo francisquillo que para algunos hace de borriquillo", suele salir ofensivo aunque se guarda del chivo (expiatorio de las culpas al que obedece).
Otro careto, al que también quizás pueda decir "Que poco hombre eres".
Como señas de más identidad, las que da la "Santisima Trinidad" que añadian en las partidas de bautismo de los caretos, posiblemente en la época del pernicioso y malévolo, del Agudo y Jimena, que sin ser de Jimena pero si siendo Romo u Obtuso con nuestros recuerdos esta corporación osó dedicarle una plaza. El destructor del simbolo mas sagrado, el del Dios Uno y Trino, que representaban en forma de Una Torre y Tres Ventanales para alojar el vocerío de las campanas en tiempos medievales. Los simbolos son indicadores de unas formas de transmitir el saber, que algunos quisieron y quieren derribar con su Obra de Dios. Motivos hay sin ir muy lejos para caer en brazos del agnosticismo.
Bueno, pues "Francisquillo" es un "spasmo" que siempre quiere estar allá donde no le llaman ni le concierne, "pobrecillo francisquillo que para algunos hace de borriquillo", suele salir ofensivo aunque se guarda del chivo (expiatorio de las culpas al que obedece).
Otro careto, al que también quizás pueda decir "Que poco hombre eres".
Como señas de más identidad, las que da la "Santisima Trinidad" que añadian en las partidas de bautismo de los caretos, posiblemente en la época del pernicioso y malévolo, del Agudo y Jimena, que sin ser de Jimena pero si siendo Romo u Obtuso con nuestros recuerdos esta corporación osó dedicarle una plaza. El destructor del simbolo mas sagrado, el del Dios Uno y Trino, que representaban en forma de Una Torre y Tres Ventanales para alojar el vocerío de las campanas en tiempos medievales. Los simbolos son indicadores de unas formas de transmitir el saber, que algunos quisieron y quieren derribar con su Obra de Dios. Motivos hay sin ir muy lejos para caer en brazos del agnosticismo.