¡Hola Tomás:
No sabes la alegría que me dio verte por el Foro, el pasado 6 de enero. Tenía pensado contestarte en el momento, pero por diversas circunstancias, no lo podido hacer hasta hoy. No sé si eres Forero habitual o aquella intervención fue flor de un día. Espero que vuelvas a aparecer. Los personajes que aparecen en la foto de arriba, ya estuvieron identificados en su día, en otra página que sólo era de fotos de Jimena pero que desapareció. No obstante, si le pedimos a algunos Foreros que nos ayuden, seguro que volvemos a identificarlos a todos. Espero que el amigo apm, con esa máquina de la "memoria histórica de Jimena" que tiene en su casa nos facilite la identificación.
Yo pienso que si nadie te contestó ese día, fue, porque, aunque hay Foreros de tu edad, no te conocieron por los apellidos.
Muchas veces, mi hermana Rafa y yo, nos acordamos de aquellos 11 años que vivimos en la calle Iglesia, nº 5, con tu casa y la mía frente a frente, sólo separadas por apenas cuatro metros. Siempre recordaré a tu padre Simón (especialmente cuando años después me enteré las injusticias y represalias que sufrió el y su familia por ser republicanos de izquierdas), de tu madre Lucía y de tus hermanos Felipe y Paqui (al pequeño Manolo, casi no lo conocí).
Nunca olvidaré las muchísimas horas que pasamos juntos jugando con los “indios” o leyendo los “cuentos” o “tebeos”, que tenías en grandes cantidades, para lo habitual de aquellos años de privaciones. Creo que tu tía ¿Antonia?, que estaba en Madrid y que también se fue huyendo de la quema era la que os los suministraba, bien por correo o en las contadas ocasiones en que venía al pueblo.
Como a todos nos pasa, los recuerdos de la infancia son inolvidables e imperecederos. Cuando el otro día se estaba discutiendo en el Foro sobre el uso de la lengua catalana (sobre el nacionalismo en el fondo) me acordé de una cita del escritor italiano Cesare Pavese (“Trabajar cansa”, “El oficio de vivir”, “La luna y las fogatas”, etc) que se me quedó gravada para toda la vida, según él “NUESTRA VERDADERA PATRIA, ES NUESTRA INFANCIA”. Desde que la leí, yo lo tengo claro.
Saludos,
No sabes la alegría que me dio verte por el Foro, el pasado 6 de enero. Tenía pensado contestarte en el momento, pero por diversas circunstancias, no lo podido hacer hasta hoy. No sé si eres Forero habitual o aquella intervención fue flor de un día. Espero que vuelvas a aparecer. Los personajes que aparecen en la foto de arriba, ya estuvieron identificados en su día, en otra página que sólo era de fotos de Jimena pero que desapareció. No obstante, si le pedimos a algunos Foreros que nos ayuden, seguro que volvemos a identificarlos a todos. Espero que el amigo apm, con esa máquina de la "memoria histórica de Jimena" que tiene en su casa nos facilite la identificación.
Yo pienso que si nadie te contestó ese día, fue, porque, aunque hay Foreros de tu edad, no te conocieron por los apellidos.
Muchas veces, mi hermana Rafa y yo, nos acordamos de aquellos 11 años que vivimos en la calle Iglesia, nº 5, con tu casa y la mía frente a frente, sólo separadas por apenas cuatro metros. Siempre recordaré a tu padre Simón (especialmente cuando años después me enteré las injusticias y represalias que sufrió el y su familia por ser republicanos de izquierdas), de tu madre Lucía y de tus hermanos Felipe y Paqui (al pequeño Manolo, casi no lo conocí).
Nunca olvidaré las muchísimas horas que pasamos juntos jugando con los “indios” o leyendo los “cuentos” o “tebeos”, que tenías en grandes cantidades, para lo habitual de aquellos años de privaciones. Creo que tu tía ¿Antonia?, que estaba en Madrid y que también se fue huyendo de la quema era la que os los suministraba, bien por correo o en las contadas ocasiones en que venía al pueblo.
Como a todos nos pasa, los recuerdos de la infancia son inolvidables e imperecederos. Cuando el otro día se estaba discutiendo en el Foro sobre el uso de la lengua catalana (sobre el nacionalismo en el fondo) me acordé de una cita del escritor italiano Cesare Pavese (“Trabajar cansa”, “El oficio de vivir”, “La luna y las fogatas”, etc) que se me quedó gravada para toda la vida, según él “NUESTRA VERDADERA PATRIA, ES NUESTRA INFANCIA”. Desde que la leí, yo lo tengo claro.
Saludos,
