Después del partido en Jodar, ¿lo recordáis?, pues hubo uno de vuelta, en nuestro campo, bueno lo de NUESTRO CAMPO os cuento la historia de nuestro campo:
Por los años sesenta, expropiaron a un agricultor seis hectáreas de secano, en lo que después seria el Polígono del Valle, lo expropiaron diciendo que era para desarrollar la ciudad, querían poner un aeropuerto, al individuo que tuvo tan feliz idea le dijeron que como iban a despegar los aviones si la mitad del terreno era desmoche de un monte, el contesto: que aterricen de cara y despeguen de culo, en fin que no pudo ser.
Como no querían devolver los terrenos pensaron hacer un complejo deportivo, cuatro campos de fútbol, pero claro, como cuatro campos cuestan casi cuatro veces mas que uno, pues al final hicieron uno con el tamaño de cuatro. Aquello no era un campo de fútbol, era el desierto del Sahara en grande, después de vallarlo, le dieron vivienda a un señor, llamado Bautista, para que se encargara de cuidarlo, cuando vio el tamaño de la instalación dijo que si no le compraban una moto el no se hacia responsable, así que se la tuvieron que comprar para desplazarse por dentro, por cierto que este señor, y su señora claro, tenían varios hijos, muchos diría yo, los niños se iban a jugar y como aquello era tan grande tardaban varios días en volver y hala, a por otro.
Al principio el campo era de hierba, pero era un problema, cuando Bautista terminaba de segarlo por un lado tenia que volver a empezar por el otro, al final le compraron una moto segadora industrial, pero el problema era la cantidad de hierba que aquello generaba, al lado había una vaquería con trescientas vacas, y se la ofrecieron al dueño, el encantado iba todos los días dos veces a por lo segado por Bautista, las vacas estaban hasta las tetas de comer hierba, en vez de leche daban chicles de menta acida, dijo el veterinario que era acida porque debían de estar cabreadas, las vacas claro, y tras una huelga de tetas caídas, ¿serian funcionarias o controladores aéreos las vacas?, arrancaron la hierba y dejaron el campo de tierra.
Cuando mas disfrutábamos del campo era cuando entrenábamos, nos juntábamos entre grandes y pequeños unos cuarenta, y como jugábamos con varios balones, pues disfrutabas mucho, a lo mejor en una sesión tocabas dos o tres veces el balón, porque en los partidos, ay amigo eso era otro cantar, yo que jugaba de lateral derecho, Palomero alguien tenia que jugar en la derecha, algunos partidos no tocaba una pelota, algunas veces la veía pasar pero muy de lejos, eso hizo que hiciera amistad con algunos extremos izquierdas, con algunos aún me hablo, porque claro había que pasar el rato.
Nosotros cuando el arbitro era mayor, que no veía muy vamos, jugábamos con doce jugadores, a uno le poníamos en la punta del campo y la vista del arbitro no llegaba allí y se lo tragaba, el problema era la numeración, antes se jugaba del uno al once, así que a este le poníamos el número 1.1 y ya esta, el problema era cuando metía algún gol, que tenia que decir otro que lo había metido.
Una vez teníamos un extremo tan rápido, y tan burro, que el entrenador le dijo que el agachara la cabeza y corriera por la banda todo lo que pudiera y cuando llegara al final que centrara, para los entendidos que diera el pase de la muerte, se salio del campo y no sabemos donde paró, esa temporada no lo volvimos a ver, el mas apenado fue el entrenador, porque se llevo la camiseta y un balón, la familia dijo que bueno que tenían seis hijos mas y que ya aparecería.
Después nos enteramos que como corrió carretera de Torrequebradilla abajo hizo saltar el radar de la Guardia Civil que ponen en el puente, cuando llego a la altura del Civil que le dio el alto, al que previamente le dijeron que iba un tipo en moto y pantalón corto, este Civil le pregunto que donde estaba la moto, a lo que el otro respondió ¿EH?, este es tonto se dijo el Civil, y que hago ahora con el, me lo llevo al Cuartelillo detenido o lo mando a los Prados, a las dos tengo que estar donde mi suegra a comer, talarines iba a hacer la señora, y como llegue tarde cobro, así que le dio la vuelta al otro y le dijo CUERPO TRISTE VETE POR DONDE VINISTE, hala a correr y este siguió corriendo esta vez hacia Jaén.
Como os podéis imaginar con un campo tan grande aunque asistieran cinco o seis mil personas, que no lo hicieron nuca, aquello parecía que estaba vacío, así que cuando jugamos con el Jodar pensamos, ¿a que cobramos otra vez aquí en nuestro campo? Pero no, se cortaron y fueron muy pocos, Palomero te diré que el del jamón, que me dio recuerdos para ti, no vino, así que jugamos tan tranquilos.
Ese partido lo volvimos a empatar, esta visto que es lo mejor que nos podía pasar a ambos, pero…….. claro la cosa no podía acabar bien, y aquí viene lo bueno, y tan verídico como lo del puente ese, Rafi y Beatriz, os cuento:
Nosotros teníamos un extremo derecha, umumumum, al que llamábamos de apodo el CHIRLAS, pues este sufrió mucho en el partido en Jodar, claro como estaba cerca del borde del campo como yo, y mira tu por donde observó que el tipo que le estuvo tocando los……pies había ido al partido de vuelta, y estaba allí, dejo acabar el partido y cuando el arbitro pito el final se dirigió hacia el banderín del corner, agarro el hierro y como si fuera una lanza, una jabalina, de las que lanzan los atletas estos días, o una pica, se lanzo hacia el aficionado galduriense,….. joder de Jodar, este que lo vio venir salio corriendo y enfilando la carretera abajo corría como una liebre, como seria la cosa que, efectivamente, volvió a saltarse el radar de la Guardia Civil, y mire usted por donde le dio el alto el Guardia de antes, cuando lo vio venir se acordó del otro y le pregunto también que donde estaba la moto, el otro tras decir ¿EH? Se tiro a su pies, pues fue su salvación, y le beso las botas, que se las dejo perdidas de baba todo hay que decirlo, el Civil ya no sabia que hacer, si detenerlo, llevárselo a su casa, darle la vuelta, o ingresarlo en los Prados, ese día comía en casa y no tenia prisa, después de este episodio el Civil pidió la baja en el cuerpo, alego que no veía las motos, y actualmente esta de pastorcillo cuidando cabras por la sierra de Andujar.
Con respecto a nuestro jugador, el Chirlas, pues no volvió a jugar al fútbol mas, se perdió un gran extremo derecho, pero el mundo de los toros gano UN GRAN PICAOR.
Saludos.
P. L. A.
Por los años sesenta, expropiaron a un agricultor seis hectáreas de secano, en lo que después seria el Polígono del Valle, lo expropiaron diciendo que era para desarrollar la ciudad, querían poner un aeropuerto, al individuo que tuvo tan feliz idea le dijeron que como iban a despegar los aviones si la mitad del terreno era desmoche de un monte, el contesto: que aterricen de cara y despeguen de culo, en fin que no pudo ser.
Como no querían devolver los terrenos pensaron hacer un complejo deportivo, cuatro campos de fútbol, pero claro, como cuatro campos cuestan casi cuatro veces mas que uno, pues al final hicieron uno con el tamaño de cuatro. Aquello no era un campo de fútbol, era el desierto del Sahara en grande, después de vallarlo, le dieron vivienda a un señor, llamado Bautista, para que se encargara de cuidarlo, cuando vio el tamaño de la instalación dijo que si no le compraban una moto el no se hacia responsable, así que se la tuvieron que comprar para desplazarse por dentro, por cierto que este señor, y su señora claro, tenían varios hijos, muchos diría yo, los niños se iban a jugar y como aquello era tan grande tardaban varios días en volver y hala, a por otro.
Al principio el campo era de hierba, pero era un problema, cuando Bautista terminaba de segarlo por un lado tenia que volver a empezar por el otro, al final le compraron una moto segadora industrial, pero el problema era la cantidad de hierba que aquello generaba, al lado había una vaquería con trescientas vacas, y se la ofrecieron al dueño, el encantado iba todos los días dos veces a por lo segado por Bautista, las vacas estaban hasta las tetas de comer hierba, en vez de leche daban chicles de menta acida, dijo el veterinario que era acida porque debían de estar cabreadas, las vacas claro, y tras una huelga de tetas caídas, ¿serian funcionarias o controladores aéreos las vacas?, arrancaron la hierba y dejaron el campo de tierra.
Cuando mas disfrutábamos del campo era cuando entrenábamos, nos juntábamos entre grandes y pequeños unos cuarenta, y como jugábamos con varios balones, pues disfrutabas mucho, a lo mejor en una sesión tocabas dos o tres veces el balón, porque en los partidos, ay amigo eso era otro cantar, yo que jugaba de lateral derecho, Palomero alguien tenia que jugar en la derecha, algunos partidos no tocaba una pelota, algunas veces la veía pasar pero muy de lejos, eso hizo que hiciera amistad con algunos extremos izquierdas, con algunos aún me hablo, porque claro había que pasar el rato.
Nosotros cuando el arbitro era mayor, que no veía muy vamos, jugábamos con doce jugadores, a uno le poníamos en la punta del campo y la vista del arbitro no llegaba allí y se lo tragaba, el problema era la numeración, antes se jugaba del uno al once, así que a este le poníamos el número 1.1 y ya esta, el problema era cuando metía algún gol, que tenia que decir otro que lo había metido.
Una vez teníamos un extremo tan rápido, y tan burro, que el entrenador le dijo que el agachara la cabeza y corriera por la banda todo lo que pudiera y cuando llegara al final que centrara, para los entendidos que diera el pase de la muerte, se salio del campo y no sabemos donde paró, esa temporada no lo volvimos a ver, el mas apenado fue el entrenador, porque se llevo la camiseta y un balón, la familia dijo que bueno que tenían seis hijos mas y que ya aparecería.
Después nos enteramos que como corrió carretera de Torrequebradilla abajo hizo saltar el radar de la Guardia Civil que ponen en el puente, cuando llego a la altura del Civil que le dio el alto, al que previamente le dijeron que iba un tipo en moto y pantalón corto, este Civil le pregunto que donde estaba la moto, a lo que el otro respondió ¿EH?, este es tonto se dijo el Civil, y que hago ahora con el, me lo llevo al Cuartelillo detenido o lo mando a los Prados, a las dos tengo que estar donde mi suegra a comer, talarines iba a hacer la señora, y como llegue tarde cobro, así que le dio la vuelta al otro y le dijo CUERPO TRISTE VETE POR DONDE VINISTE, hala a correr y este siguió corriendo esta vez hacia Jaén.
Como os podéis imaginar con un campo tan grande aunque asistieran cinco o seis mil personas, que no lo hicieron nuca, aquello parecía que estaba vacío, así que cuando jugamos con el Jodar pensamos, ¿a que cobramos otra vez aquí en nuestro campo? Pero no, se cortaron y fueron muy pocos, Palomero te diré que el del jamón, que me dio recuerdos para ti, no vino, así que jugamos tan tranquilos.
Ese partido lo volvimos a empatar, esta visto que es lo mejor que nos podía pasar a ambos, pero…….. claro la cosa no podía acabar bien, y aquí viene lo bueno, y tan verídico como lo del puente ese, Rafi y Beatriz, os cuento:
Nosotros teníamos un extremo derecha, umumumum, al que llamábamos de apodo el CHIRLAS, pues este sufrió mucho en el partido en Jodar, claro como estaba cerca del borde del campo como yo, y mira tu por donde observó que el tipo que le estuvo tocando los……pies había ido al partido de vuelta, y estaba allí, dejo acabar el partido y cuando el arbitro pito el final se dirigió hacia el banderín del corner, agarro el hierro y como si fuera una lanza, una jabalina, de las que lanzan los atletas estos días, o una pica, se lanzo hacia el aficionado galduriense,….. joder de Jodar, este que lo vio venir salio corriendo y enfilando la carretera abajo corría como una liebre, como seria la cosa que, efectivamente, volvió a saltarse el radar de la Guardia Civil, y mire usted por donde le dio el alto el Guardia de antes, cuando lo vio venir se acordó del otro y le pregunto también que donde estaba la moto, el otro tras decir ¿EH? Se tiro a su pies, pues fue su salvación, y le beso las botas, que se las dejo perdidas de baba todo hay que decirlo, el Civil ya no sabia que hacer, si detenerlo, llevárselo a su casa, darle la vuelta, o ingresarlo en los Prados, ese día comía en casa y no tenia prisa, después de este episodio el Civil pidió la baja en el cuerpo, alego que no veía las motos, y actualmente esta de pastorcillo cuidando cabras por la sierra de Andujar.
Con respecto a nuestro jugador, el Chirlas, pues no volvió a jugar al fútbol mas, se perdió un gran extremo derecho, pero el mundo de los toros gano UN GRAN PICAOR.
Saludos.
P. L. A.
Pachuelo, acabo de llegar de dar el paseo mañanero y me he puesto a leer tu relato, joder vaya crónica futbolera, de todos modos me da pena no haberte conocido en esa época te hubiera traído a Osasuna y quien sabe igual ahora estarías en el puesto de Camacho, mira que nosotros los de Jimena somos la host.... mi suegro que era funcionario me preguntaba al principio de conocerme haber cuantos habitantes tenia Mi Pueblo si era mas grande que la capital Jaén, pues todos los que le iban a su puesto de trabajo eran de Jimena, mira por donde habría de tener para toda la vida como yerno a uno de estos.
Bueno que pases buen finde y que nos sigas dando crónicas deportivas el caso es que alguien cuente algo.
A ver si el Palomero se levanta y nos pone algo de la noche del cante.
Un saludo.
Mariano.
Bueno que pases buen finde y que nos sigas dando crónicas deportivas el caso es que alguien cuente algo.
A ver si el Palomero se levanta y nos pone algo de la noche del cante.
Un saludo.
Mariano.