Cosas de Mi Pueblo.
Hola Paisanos@.
Hoy a petición de alguna paisana os voy a contar a Mi manera lo que eran en aquellos tiempos que recuerdo posteriores a la Fiesta.
Ni que decir tiene que no eran días muy gloriosos, pues si añadimos a que el verano se iba despidiendo, las Fiestas y los forasteros también se habían marchado, el ambientillo de aquellas noches de liga en la carrera, en la plaza o en entre vecinos en las huertas también habían finalizado todo ello dejaba un vacío en aquellos contornos de la calza o las protegidas donde en ambos sitios fui testigo, la verdad es que hoy lo vuelvo a recordar y me paseo entre la nostalgia y la tristeza algo para mi inevitable.
Pero bien volvamos un poco a lo positivo que lo había, comenzaba el curso escolar y sentías un cierto cosquilleo porque de nuevo comenzaba un nuevo curso acompañando aquella enciclopedia de Álvarez, posiblemente con cambio de Maestro y también con algún compañero nuevo, sin olvidarnos de que era el momento de volver a estrenar material escolar como libretas, lápices o aquellos pizarrines de la marca alpine con los que dábamos color aquellos dibujos de los mapas de España o los escudos de nuestro equipos de futbol favoritos por poner algunos ejemplos que recuerdo.
También las huertas o la olivas tenían nuevas tareas, en las huertas era el momento de ir recogiendo los zarzos y guardándolos dentro de las casillas para el año próximo una vez habían cumplido un año mas la misión de secar los higos que no se podían vender de frescos o que el cochino ya no podía comer mas, casi los tenia aborrecidos, recuerdo aquel cochino que llevábamos a la huerta al principio de verano espigado y con poco panza y volvía que casi no había forma de sacarlo de la zahúrda de lo que había engordao de tanto albarillo, breva, higos o manzanas, también se arrancaban las matas de tomates y pimientos del vergelillo aunque fueran verdes y junto a las granas hacer aquellas panochas con esparto que se guardaban en las camaras y que seria el postre o el acompañamiento a unas buenas migas de pan algún día de lluvia del otoño que se aproximaba.
Eran días en las que una vez gastadas la, o las orzas de aceituna larga por cierto. ¿Habrá algún Jimenato o Jimenata que no le gusten? Quien tenia iba preparando alguna orcilla de aceituna de agua machaca para que se iría haciendo.
Recuerdo un hecho muy importante y que daba el cierre a la temporada de la huertas este no era otro que el abareo de la noguera, todo un acontecimiento garrotes y bara en mano se disponían ha recoger la cosecha de nueces, era un día que se comparaba con el butifuera de la campaña de aceituna, no exento de unos buenos talarines o el tradicional guiso de trigo! Que rico verdad! Toda la familia desde la mañana entorno a la noguera, el abuelo o el Padre echaría por ultima vez el mercedero donde los mas jóvenes nos divertíamos y hasta nos peleábamos para ver quien se subía y se mercia mas veces algo que los mayores siempre se llevaban la palma y si terminaba un año mas la temporada de verano en Mi Pueblo.
M. Nieto de M. Rasca
Hola Paisanos@.
Hoy a petición de alguna paisana os voy a contar a Mi manera lo que eran en aquellos tiempos que recuerdo posteriores a la Fiesta.
Ni que decir tiene que no eran días muy gloriosos, pues si añadimos a que el verano se iba despidiendo, las Fiestas y los forasteros también se habían marchado, el ambientillo de aquellas noches de liga en la carrera, en la plaza o en entre vecinos en las huertas también habían finalizado todo ello dejaba un vacío en aquellos contornos de la calza o las protegidas donde en ambos sitios fui testigo, la verdad es que hoy lo vuelvo a recordar y me paseo entre la nostalgia y la tristeza algo para mi inevitable.
Pero bien volvamos un poco a lo positivo que lo había, comenzaba el curso escolar y sentías un cierto cosquilleo porque de nuevo comenzaba un nuevo curso acompañando aquella enciclopedia de Álvarez, posiblemente con cambio de Maestro y también con algún compañero nuevo, sin olvidarnos de que era el momento de volver a estrenar material escolar como libretas, lápices o aquellos pizarrines de la marca alpine con los que dábamos color aquellos dibujos de los mapas de España o los escudos de nuestro equipos de futbol favoritos por poner algunos ejemplos que recuerdo.
También las huertas o la olivas tenían nuevas tareas, en las huertas era el momento de ir recogiendo los zarzos y guardándolos dentro de las casillas para el año próximo una vez habían cumplido un año mas la misión de secar los higos que no se podían vender de frescos o que el cochino ya no podía comer mas, casi los tenia aborrecidos, recuerdo aquel cochino que llevábamos a la huerta al principio de verano espigado y con poco panza y volvía que casi no había forma de sacarlo de la zahúrda de lo que había engordao de tanto albarillo, breva, higos o manzanas, también se arrancaban las matas de tomates y pimientos del vergelillo aunque fueran verdes y junto a las granas hacer aquellas panochas con esparto que se guardaban en las camaras y que seria el postre o el acompañamiento a unas buenas migas de pan algún día de lluvia del otoño que se aproximaba.
Eran días en las que una vez gastadas la, o las orzas de aceituna larga por cierto. ¿Habrá algún Jimenato o Jimenata que no le gusten? Quien tenia iba preparando alguna orcilla de aceituna de agua machaca para que se iría haciendo.
Recuerdo un hecho muy importante y que daba el cierre a la temporada de la huertas este no era otro que el abareo de la noguera, todo un acontecimiento garrotes y bara en mano se disponían ha recoger la cosecha de nueces, era un día que se comparaba con el butifuera de la campaña de aceituna, no exento de unos buenos talarines o el tradicional guiso de trigo! Que rico verdad! Toda la familia desde la mañana entorno a la noguera, el abuelo o el Padre echaría por ultima vez el mercedero donde los mas jóvenes nos divertíamos y hasta nos peleábamos para ver quien se subía y se mercia mas veces algo que los mayores siempre se llevaban la palma y si terminaba un año mas la temporada de verano en Mi Pueblo.
M. Nieto de M. Rasca