JIMENA: Y a los que venían al entierro, allí estaba, entre...

¡Qué noche de perros!, Mariano. Hasta con truenos.

Me viene a la memoria una noche como ésta que fuimos con Raimundo a "Las Fuentes", armados de carburo, linterna, y alpargata. ¡Póbreticos los pajarillos!, ateridos de frío, colgados en los aldares, ¡ZAS!, alpargatazo que te crió, y al saco.

Esta modalidad de caza no me consta que esté prohibida. Además, en una noche como ésta, no creo que los del SEPRONA estén "cazando".

¡Anda!, Mariano, tú que tienes buena maña para contarnos cosas. ¡Cuenta!, ¡Cuenta!.

pobres pajarillos, morían al instante? (después del alpargatazo, me refiero)

A algunos les daba tiempo a escribir sus últimas voluntades, mp.

Un saludo

.

¿Ya estamos con el cachondeo?. ¡Coño!, que esto es cuestión de vida o muerte.

Y a los que venían al entierro, allí estaba, entre otros muchos, Palomero con la manopla. ja, ja, ja.

Un saludo

Que yo cazo moscas, no pájaros, que está prohibido.

.

No, el Palomero esa noche, No.

En otra Sí estuvo, pero fue en la caza del CONEJO con escardillo.

La noche de los pajarillos se remonta a más de 30 años. Posiblemente, Palomero estuviera por tu ciudad.

Esa noche, si la memoria no me traiciona, los protagonistas fuimos Raimundo, Francisco Alonso y yo. El coche lo puse yo y el barro me lo pusieron ellos.