JIMENA: Muy documentada y posiblemente, por los estudios hechos,...

Rodeado de su familia el último cofrade presente vivo, Juan Muñoz Moreno

Parece que lo estoy viendo en las cuatro esquinas toreando la bandera, que manejo le tenia. Al tambor Tomás Gonzalez (galano) en la puerta de su cuñada Petra y a Juan Muñoz Moreno en la puerta de mas abajo de Jose Lozano Fernandez o anteriormente de Bartolomé Gámez Leon Bartolo el de la tienda, ellos en la calle Bella y las demas personas en la calle Barriobajo, frente al sindicato.
Un saludo.
Bartolome

El Santo Cristo de Cabrilla
(Llegada del Cristo de Burgos al pueblo de Cabra -Jaén-)

El texto del carmelita Fray Antonio de Jesús María; perteneciente a la biografía del Cardenal Moscoso y Sandoval; describe, siguiendo como él mismo afirma, el escrito que de su puño y letra le había facilitado el noble burgalés D. Jerónimo de Sanvítores y de la Portilla que en 1633; cuando D. Jerónimo (caballero santiaguista) estando en Madrid como procurador a Cortes por su ciudad natal de donde era alcalde mayor y perpetuo, Burgos; sufrió una grave enfermedad. Y que tras encomendarse a un pequeño retrato que llevaba consigo, copia del Cristo de Burgos, mejoró de su dolencia. En este momento deseó poseer una copia más grande y hermosa del Cristo, pero los religiosos agustinos no le concedieron licencia para mandarla a hacer ya que el Cristo de Burgos estaba cubierto por unos velos que solamente se descubrían los viernes después de la misa conventual; momento que aprovechaban los devotos para visitarlo y orar ante Él; por lo que sería muy molesto que al mismo tiempo un pintor estuviese allí trabajando.

Vuelto a Madrid consiguió el permiso del Provincial de la Orden, Padre Fray Diego de Rivadeneira, quien se vio muy presionado por el Padre Fray Alonso de Sanvítores, monje benedictino, en esos momentos General de la Orden y hermano de D. Jerónimo. Aunque sus muchas ocupaciones cortesanas hicieron que pasaran dos años sin materializar su anhelado deseo. Cuando en su nombramiento como corregidor de México, sintiéndose ya sin fuerzas para tal aventura, suplica al rey Felipe IV tenga a bien permutárselo por otro cargo, acude al Cristo de Burgos para que fuera su valedor ante el Monarca.


Entonces el rey accede, permutándoselo por el corregimiento de las ciudades de Guadix, Baza y Almería (1636). Siendo ahora cuando D. Jerónimo, estando en Burgos para preparar su traslado, logra hacer realidad su pretensión. El pintor encargado fue Jacinto Anguiano Ibarra, un artista burgalés de mediana calidad, discípulo de Mateo Cerezo (el Viejo). El día 20 de septiembre, después de cuatro horas en la capilla, realizó un boceto que acabaría en su estudio. Así pues, el Cristo de Cabrilla tendría faldellín blanco, con una cenefa de encaje con delicadas puntillas, similar a unas enagüillas (de ahí que también popularmente se le haya conocido como “Santo Cristo de las enagüillas”). La calavera en la parte inferior, sobre ella un huevo de avestruz y no tres como tradicionalmente se viene afirmando. Todo ello sobre un pequeño montículo (el Calvario o Gólgota). A partir de aquí, las variantes se multiplicarán al hacerse las reproducciones no directamente del original sino de grabados, descripciones orales de devotos, otras reproducciones, etc.

D. Jerónimo envía sus pertenencias a Guadix, su nuevo destino, llegando la comitiva a esta localidad el 19 de enero. Antes de llegar a Cabra sucedieron varios hechos que desembocaron en una fuerte devoción a la imagen del lienzo. Ante esta situación, D. Jerónimo, como legítimo propietario del cuadro y con el apoyo de la ciudad de Guadix, pide al Nuncio su devolución, aunque ya recibía multitudinario culto en su iglesia parroquial. Sin embargo, aquí entra en juego la intervención de dos grandes personajes: por un lado el obispo de Jaén, cardenal Baltasar de Moscoso y Sandoval, y por otro el prior de la villa, el doctor Palomino de Ledesma y Aguilar. Especialmente este último; pues; guiado por motivaciones religiosas y quizás también pensando en los posibles beneficios de tipo económico que la permanencia en su priorato de tan nombrado Cristo le pudieran reportar; negocia hábil y sutílmente entre unos y otros. El resultado de su gestión es que el 14 de sep­tiembre de dicho año, D. Jerónimo de Sanvítores, dona a la iglesia de Cabra el lienzo. Previamente el obispo de Jaén, cardenal Sandoval, le había cedido a cambio una serie de privilegios como el patronato de la capilla mayor de su iglesia donde colocaría su escudo de armas, un relato con el milagroso suceso, construir una cripta para su enterramiento y “... que de las cofradías que se hubieren de fundar y fundaren en la dicha iglesia de Cabrilla a contemplación y devoción de la dicha Santa Imagen se de el primer lugar a la que fundare la ciudad de Guadix y que cuando viniere a hacer su fiesta principal a catorce de septiembre salgan las demas cofradías a recibirla con sus estándartes a la ermita de Nuestra Señora del Rosario y el prior y clérigos a la puerta de la iglesia viniendo la dicha cofradía con su estandarte y no de otra manera”.
Fue en la víspera del 20 de Enero de 1637 cuando llegó el lienzo a la localidad de Cabra. Curiosamente en esta localidad la denominación más común es la primera (Cristo de Burgos), y nunca han hecho distinción entre la copia de Cabra y el original de la ciudad castellana. A partir de aquí se siguió extendiendo la devoción por toda Andalucía, llegando entonces a adoptar el nombre de “Cristo de Cabrilla” que es como se le reconoce aquí en Málaga, a diferencia de localidades como Sevilla y Granada que se les reconoce como Cristo de Burgos y Cristo de San Agustín respectivamente. Igualmente, en toda la documentación oficial de Cabra, siempre, se le denominó como Santo Cristo de Burgos. La advocación de Cristo de Cabrilla, mucho más localista, sí tuvo antaño un fuerte arraigo en el ámbito rural, popular y cofradiero, tanto en Cabra, como fuera, por la gran incidencia que tuvo su devoción en estos sectores.
Un saludo.
Mariano

Hola Mariano: gracias por contarnos con todo detalle la historia del cuadro del "Cristo de Burgos".
Un saludo.

Muy documentada y posiblemente, por los estudios hechos, la correcta, pero existe otra popular que es muy simpática, cuando termine de recomponerla la expondremos aquí, es muy llamativa, aunque como todo lo que pasa de boca en boca termina siendo muy fantástico y novelesco, pero también tiene su gracia
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Pues cuando tengas tiempo nos la cuentas.
Un saludo.