JIMENA: Cuando terminamos el campamento en Marines, Valencia,...

Cuando terminamos el campamento en Marines, Valencia, donde a pesar
del nombre, y del lugar, ni había barcos ni por supuesto mar, nos
dieron los destinos, cuando el Teniente dijo el Regimiento de
Infantería Motorizada Tetuán XIV, catorce para los que no lo recuerden
, en Castellón de la Plana, soltó un “ joder”, a mi, por supuesto me
tocó en ese cuartel, es mi sino, cuando le preguntamos porque habia
dicho aquello, si es que ese cuartel era tan malo, dijo” NO NO ES TAN
MALO, NO ES EL INFIERNO,,, ES SOLO LAS PUERTAS DEL INFIERNO”.

Así que pasados unos días nos incorporamos al Cuartel famoso, como era
de Infantería, digo era porque ahora es una dependencia del
ayuntamiento, pues estaban preparando el día de la patrona, La
Inmaculada Concepción, no os puedo contar las de vueltas haciendo instrucción que dimos en
el patio de armas, y eso que era grande, como a mi cuando hago las
cosas, me gusta hacerlas bien, me tome en serio lo del desfilar y
tenía en el hombro derecho una ampolla del roce de la ropa al bracear.

Al cabo de unos días haciendo instrucción, un Capitán
que estaba de observador, me sacó de las filas, me preguntó que
necesitaba Policías Militares y Gastadores, que eligiera, yo pensé,
policía ni en broma como dice el Sabina, que listo soy yo eh?, y como
me gusto mas lo de gastador allí que me fui.

Nada mas entrar en la nueva unidad me atiborraron a utensilios, lo
primero me ascendieron a soldado de primera, cobraba mas dinero, bueno
una peseta como así también nos llamaban, cuando mi mama se entero
decía en la tienda que su Pedro nada mas llegar y verlo lo habían
ascendido a Comandante, luego yo le conté lo que era y ella, por
vergüenza, me fue quitando cargos poco a poco, el día siguiente ya era
Capitá, luego teniente, y así sucesivamente
.
A mi cuando me pusieron el galón en la gorra, te lo ponían los
veteranos, me hizo mucha ilusión, pensé para mi, joder si llevo dos
semanas aquí y ya e ascendido, cuando esté a punto de licenciarme
nuestro amigo Gil, después de cuadrarse ante mi, me tendrá que dar novedades.

Bueno también me dieron unos colgajos de color rojo, como los de las
cortinas, que teníamos que llevarlos siempre, me dijeron, en la ducha te
los quitas jilippp……
.
Me dieron una pala que no servia para nada, era de calamina, y
pensé donde coño me he metido yo, me vuelvo de fusilero antes de
ponerme a cavar, yo pensé eso, que era mas listo, pero al Iker, un vasco que
le dieron un serrucho, también de calamina, lo pillaron cuando estaba
podando el segundo pino del jardín
.
Ya una vez repuestos de los sustos y enterados que eso era para
ponérnoslos en las espaldas, yo seguí sin fiarme y, claro aquí estaba
la trampa, cuando nos dicen que a hacer instrucciónr, con la
salvedad de que el espacio que ocupaba una compañía, calculo que unos
doscientos hombres mas o menos, lo teníamos que ocupar SIETE, si si,
siete, así que si parpadeabas a destiempo se enteraba hasta el gato,
estuve haciendo instrucción todo el día, y el siguiente, y el
siguiente, quién me mandaría a mi meterme en ese berenjenal, con lo
bien que habría estado yo de policía militar, diciendo aquello de “eh
tu los papeles”.

Los gastadores no solo nos dedicábamos a desfilar los primeros,
nosotros no teníamos cabra porque en esa zona no se crían bien,
también hacíamos de escolta y de correveidile del Jefe del
Regimiento, nosotros somos los antecedentes de los teléfonos
móviles, os cuento, el Jefe tocaba un número, el suyo era el uno, y
salíamos corriendo a su despacho, y el te decía, un suponer,:” dile a
Manolo Pérez, que me vea dentro de media hora en la armería “, tu
tenías que saber quien era el citado Capitan, a esa hora donde estaba, y
sobre todo, que te entendiera bien, porque no era lo mismo decirle “EN
MEDIA HORA EN LA ARMERÍA” que “ EN MEDIA HORA EN ALMERÍA”, porque te
jugabas el cargo, bueno y el pescuezo casi
.
A los gastadores en la unidad nos respetaban mucho, a la fuerza
ahorcan, porque no siempre les venia bien la llamada, o lo que
fuera, y tu pues tenias que capear con todos, para que
estuvieran contentos, nosotros podíamos circular por todo el
Regimiento a cualquier hora del día y la noche, además de que en
alguna ocasión teníamos que cumplir ordenes de madrugada.

En una ocasión con motivo de irse el Coronel a Valencia a hacer el
curso de General, se quedo de Jefe del Regimiento un Teniente Coronel
, al que apodaban el YANQUI, por lo visto dicen que sirvió un tiempo
en ese ejercito, el caso es que le temían, todo el mundo, mas que a una
vara verde, el además impresionaba, era alto, muy delgadito y llevaba
el pelo casi rapado, ya tenías unos cuantos años, se llamaba Benitez,
a nosotros no venía muy bien pues cuando los Oficiales nos veían
aparecer dejaban todo lo que estaban haciendo para atender lo que le
requeríamos, por supuesto ordenes del Tcol.

Este Tcol. vivía en un pabellón que estaba adosado al cuartel, en una
ocasión me llamo, el numero uno acordaros, y me dijo que fuera a su
casa y que atendiera lo que me dijera su mujer, yo me plante raudo y
veloz y la señora me preguntó que de donde era, yo le conteste “ de
Jaén señora” y ella me dice, “ estupendamente seguro que tu sabes de
jamones así que te vas al economato y me traes uno”, seguro que si le
digo que soy de Jabugo me manda por aceite.

Pues héteme aquí que me planto en el economato y me atiende el Brigada,
Intuyendo que mi visita era para un encargo de algún Jefe, ¿que
quieres gastador? Pues quiero un jamón, muy bien ahora te lo traigo,
al cabo de unos minutos sale con un jamón y me lo esta envolviendo
cuando me pregunta ¿y este jamón a quien se lo cargamos? Cuando le
dije que al Tcol. Benitez por poco le da un patatús, desenvolvió el
jamo rápidamente y lo volvió a colgar al tiempo que me decía” PUES ESE
LO VAS A ELEGIR TU, SI TE EQUIVOCAS QUE SEAS TU”, yo no había tenido
un jamón en las manos en mi vida, solo en bocadillo, así que pensé,
pues cojo el mas grande que total, yo siempre había oído que como el
hueso pesa lo mismo cuanto mas grande sea el jamón, menos hueso y
, mas carne te llevas, así que pedí uno que pesaba NUEVE KILOS Y
MEDIO, madre mía que cosa mas grande.

Cuando le llevé el jamón a la señora, esta al principio se asustó, y
luego me pregunto si eso era de un cerdo o de un mulo, yo la
tranquilice y le dije que de cerdo, seguro..

Así se quedo la historia hasta que pasados unos días el Tcol. Cuando
iba con el de escolta me preguntó. “ ¿TU NO ERES EL QUE LLEVO EL
JAMON A MI CASA? Yo conteste si señor, y el me dijo, “ cuando
acabemos le dices a tu Sargento que venga a verme” yo pensé para mi
esto es que me va a dar un permiso.

Como quiera que ese año se celebraba el día de las fuerzas armadas en
Valencia y mi unidad iba a participar, estrenamos los BMR, blindados
medios sobre ruedas, se hicieron varios ensayos, los hacíamos en una
localidad cercana, Benicasim, que tenía un paseo larguísimo y estaba sin
terminar, mi Sargento, el que estuvo hablando con el Tcol. Fue
dejando a cada uno de nosotros en un punto de plantones para seguridad
de las personalidades que iban a asistir, a mi me dejo para el final,
y tan al final que me dejo, el jeep empezó a andar, y andar, y andar,
ya no se veía nada del festejo, me dijo tu te quedas aquí sin moverte y
ya vendré a recogerte, el lugar era paradisiaco, osea la playa, la
carretera donde yo estaba y el sol, desde las nueve de la mañana
hasta las seis de la tarde sin moverme, a mi me iba a dar algo, paso
por allí una pareja de la Benemérita y me preguntaron que hacía allí,
se lo explico y tras reírse se fueron, después de acercarme una
botella de agua.
Cuando fueron a recogerme le lengua me llegaba las rodillas, pero yo
no dije nada, total para que.
Al día siguiente mi Sargento, buena gente, me dijo que tal lo había
pasado, le dije que mal, y me contó que eso no era nada para lo me
querían meter, que como se me había ocurrido hacer aquello, yo estaba
perplejo, no sabia a que se refería cuando me soltó” COMO SE TE OCURRE
COGER UN JAMON DE NUEVE KILOS Y MEDIO SALADO COMO UNA BACALÄ Y LLEVARSELO AL JEFE QUE SE LONA COMIDO ENTERO”
querían mandarte al Sahara.
Esto del Jamón, Palomero, te lo juro por esnupi que es cierto.
EA a descansar, un abrazo.
Pedro.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Y te creo, te creo, pero yo de la mili no cuento histórias para que no digais que no son verídicas (por no llamarme embustero, que queda mal), solo deciros que un lunes de Pascua le dije al Teniente Coronel, Ayundante del Gobernador Militar de Granada, que era el que estaba en medio de los dos, (El General el mas mandaba, el Teniente Coronel, su Ayudante, y yo el Ordenanza de Pasillo, entre los tres llevabamos el Gobierno Militar de Granada, y tengo testigos, ehhhhhhhh) que me había quedado bloqueado ... (ver texto completo)
¿Y es que yo no?, con las poderosas razones que te he dado.
Ahora me explico como eres un experto en jamones... tuviste que aprender a la fuerza.
Pobrecito mio allí tirado en la playa, sin una gota de agua, para beber digo.
Bueno Gastador de GASTADORES, gracias por tu relato.
Un besico, que para un abrazo soy muy chiquitita, Gastador.
Tampoco, ¿es que no sé por qué te quejas tanto?, tan solo te habían puesto como primer controlador de entrada a la ciudad, te habían dado rango de "experto vigía significado".