LA TENTACIÓN
¡Que linda en la rama
la fruta se ve!
Si lanzo una piedra
tendrá que caer.
No es mío este huerto
no es mío lo sé:
más yo de esa fruta
quisiera comer.
Mamá está lejos,
papá no me ve,
no hay aquí otros niños...
¿quién lo ha de saber?
más no, no me atrevo;
yo no sé por qué;
parece que siempre unos ojos me ven...
Papá no querría
besarme otra vez,
mamá lloraría
de pena también.
Mis buenos maestros
dirían tal vez:
“ ¡qué niño tan malo,
no jueguen con él!”.
No quiero, no quiero;
yo nunca he de hacer
sino lo que haría
si todos me ven.
Llegando a mi casa
caricias tendré,
abrazos y besos,
y frutas también.
J. A. Márquez
¡Que linda en la rama
la fruta se ve!
Si lanzo una piedra
tendrá que caer.
No es mío este huerto
no es mío lo sé:
más yo de esa fruta
quisiera comer.
Mamá está lejos,
papá no me ve,
no hay aquí otros niños...
¿quién lo ha de saber?
más no, no me atrevo;
yo no sé por qué;
parece que siempre unos ojos me ven...
Papá no querría
besarme otra vez,
mamá lloraría
de pena también.
Mis buenos maestros
dirían tal vez:
“ ¡qué niño tan malo,
no jueguen con él!”.
No quiero, no quiero;
yo nunca he de hacer
sino lo que haría
si todos me ven.
Llegando a mi casa
caricias tendré,
abrazos y besos,
y frutas también.
J. A. Márquez