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JIMENA: ... Ya no sé qué hacer con esta loca computadora. Parece...

Ni el Arguiñano, vaya estilo, todas entraron de nuevo a la sarten

Oportuna y al mismo tiempo preciosa foto.

Wuauuuu... ¡provoca colocarle las manos para recoger las que se puedan caer! Me parece que son migas de pan ¿o serán de harina de trigo?. De cualquiera manera, me encantan y supongo que las acompañarían con unas aceitunitas (rajadas y aliñaitas), tal vez con unos pimienticos secos, y vaya usted a saber con qué más...
Hoy, aprovechando que mi mamá está conmigo, le decía que debíamos hacer unas gachas. Mejor dicho, élla me irá diciendo qué hacer y yo seguiré las instrucciones como buena alumna. Si las hago, ya diré cómo me quedaron. Saludos, Ana

Con ese repostero tengo yo una anécdota muy curiosa.
Aún estabamos los dos solteros allá por Barcelona, corría el año 1975 durante el mes de julio, me acompañaba mi hermana la mayor, que había ido a ayudarme ya que me había quedado con un piso en alquiler y había que adecentarlo, ya que seríe mi residencia familiar una vez que contrajese matrimonio, lo que sucedió al mes siguiente.
Pues bien, como eramos buenos amigos y se iba conmigo a ligar, yo tenía un porrón de cristal que transformaba el agua en vino y por eso lo usabamos mucho,
Como era sábado nos propusimos hacer unas migas, este señor, muy delgado por aquellos entonces, yo no estaba tampoco tan bello como ahora, también como dije anteriormente se encontraba mi hermana y otras personas, que en este momento no recuerdo sus nombres, pero sé que había mas gente, el de la foto después de "esmenuzar el pan" lo mojó, como recomiendan todos los restauradores para hacer las famosas migas, pero creo que se pasó un poquito y estaban muy "barrosas", total después de mucho menear la paleta en la sartén, las migas seguian barrosas, como se hizo muy tarde comimos otra cosa y las dejamos para el domingo, vuelta otra vez a la misma operación, pero las migas seguian barrosas de tal forma que también comimos otra cosa, las guardamos liadas en "un cernaero", de tal forma que el lunes estuvieron todo el día en reposo ya que todos trabajabamos y no nos podíamos entretener, pero al día siguiente martes cayó en fiesta y "hete aquí" que se presentó para terminar la faena, fué un jolgorio, le echamos unos "torreznos", unos trocitos de chorizo, en porciones pequeñas, unos pimientos secos que me habían mandado mis padres, unos pictantillos (solo tenian sabor) verdes fritos, como en Barcelona había de todo, compramos uvas y granas, partimos un melón y al lado unas aceitunitas de agosto, largas rajás, empezamos a comer a las tres de la tarde y terminamos a las tres siguientes, ya era un poquito de noche, el remate fué que creo que ambos, no se nos entendía muy bien porque estabamos hablando en catalán.
Conclusión, como tercos que éramos hicimos que las migas cayeran.

Supongo que de esa experiencia, el cocinero en cuestión, aprendió la medida exacta del agua donde debe remojarse el pan. Por cierto, por más que miro la foto, no reconozco al señor de quien hablamos y creo entender que es de Jimena y además contemporáneo nuestro ¿

... Ya no sé qué hacer con esta loca computadora. Parece que tiene prisa y salta con tan sólo rozarla. Bueno, te iba a preguntar quien era el sr. cocinero. Hoy está lloviendo muchísimo en el Edo. Lara y estamos en casita tranquilitos. Yo estoy metida en youtube oyendo buena música, pero este tiempo me tiene un tanto "achicopalada"..., es más, mejor apago la música, pues así como me siento, esas melodías más bien me deprimen... Voy a integrarme al grupo familiar que están viendo una película en la tele. Hasta otra.