Claro, para pitarle un penalty a este equipo tienen que atacar a sus delanteros con un cuchillo y para que le expulsen uno del equipo contrario tienen que ir dos o tres del
Madrid en camilla al vestuario, ya que los árbitros a los del Madrid le dicen como Jesús a Lázaro: "levantate y anda, que el
teatro solo se le permite a un equipo", como alguno se le ocurra dar empujoncitos al contrario para marcar los goles o saque los codos a pasear como Suárez, le caen de diez partidos en adelante de suspensión
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