Luz ahora: 0,11278 €/kWh
La Rabita, PUEBLO DE MENLANCOLIA, digo esto por lo que vivi en los anos ~1945!, la historia es algo larga y de mucha confusion personal al lector, Mi Tia era la esposa de entonce el Alcalde de esa Ciudad, su nombre era Pura Garcia, yo, por suerte o no, vivi un dia terrible en esa ciuda, De paso iba yo
cuando el hambre me ataco, y sin mas que pensar no bacile en meterme en una casa donde acababa de morir un familiar, en en medio de tanto lloriscos y gritos yo entre sin, claro saver que es lo que ocurria, y vi una mesa llena de comidas, no sabia que hacer y ni aquien preguntar, pero cuando menos espere, me vi sentado en la mesa comiendo y me di harton de comida que hasta trabajo me daba caminar por la calle, yo mendigaba entonces un nino de 4 anos? y mi direcion era sin rumbo solo que caminaba de pueblo en pueblo, y me acercaba a las caserones grandes con la creencia de que ahi habria mas para comer, lo que si me recuerda es que yo sali del velorio y alguien me dio un abrazo y muchos besos!, Dios bendiga a esa persona, que ni su nombre nunca supe.
Nunca mas regrese a La Rabita, talvez por el miedo de que me encontrara otra vez con un caso parecido, pero si he de decir que no olbido el corazon que mostraron a un nino de 4 ano.
Saludos y abrazos desde CANADA
Jacinto
un ano mas tarde fui encontrado a mas de 200 kilometros dormiendo en unas escalera de una familia millonaria, ellos fueron quienes me dieron todo cuanto se y tengo hoy.
cuando el hambre me ataco, y sin mas que pensar no bacile en meterme en una casa donde acababa de morir un familiar, en en medio de tanto lloriscos y gritos yo entre sin, claro saver que es lo que ocurria, y vi una mesa llena de comidas, no sabia que hacer y ni aquien preguntar, pero cuando menos espere, me vi sentado en la mesa comiendo y me di harton de comida que hasta trabajo me daba caminar por la calle, yo mendigaba entonces un nino de 4 anos? y mi direcion era sin rumbo solo que caminaba de pueblo en pueblo, y me acercaba a las caserones grandes con la creencia de que ahi habria mas para comer, lo que si me recuerda es que yo sali del velorio y alguien me dio un abrazo y muchos besos!, Dios bendiga a esa persona, que ni su nombre nunca supe.
Nunca mas regrese a La Rabita, talvez por el miedo de que me encontrara otra vez con un caso parecido, pero si he de decir que no olbido el corazon que mostraron a un nino de 4 ano.
Saludos y abrazos desde CANADA
Jacinto
un ano mas tarde fui encontrado a mas de 200 kilometros dormiendo en unas escalera de una familia millonaria, ellos fueron quienes me dieron todo cuanto se y tengo hoy.
