QUESADA: Que buena persona Manolo y su mujer y buenos vecinos,...

Al igual que nos ponemos vendas en los ojos para no ver la grave situación en que nos encontramos y recurrimos a la virgen de Tíscar como panacea de nuestros males, creemos también que lo que no pasa en nuestro ambito familiar cercano es valedero para todos. Muy grande el fervor, muy bonitas las procesiones con alcalde, bastón de mando y presidente y miembros de la cofradia con caras serias y trajes recien planchados. Por desgracia nada que pueda mitigar los problemas básicos de la sociedad: el paro, el desarme social y las corruptelas de algunos políticos. De todas formas está bien pues, aunque sea por dos horas, significarán un escape mental a las cuitas que nos embargan.
Y ahora al otro vendaje. El que, como dice Ramón Moya, haya tenido la suerte de crecer en una familia donde la armonía impera en un perfecto balance entre el hombre y la mujer, tiende a creer-muy nuestro esto tambien-de que eso es así en todas las familia poniendose esa venda imaginaria.
Por suerte en Quesada hay mujeres que han sabido medrar intelectual y profesionalmente partiendo de su propia individualidad, dejando atrás viejos perjuicios y poniendose a la altura del momento, además, y esto es lo importante: sim perder sus atributos femeninos. Otras sin embargo, son herederas del machismo que fue el faro que guió su educación y que hoy emana en un comportamiento que las convierte en remedos del hombre macho.
El tercer grupo serían todas esas pobres víctimas de la profunta opresión, de ser un obteto más en el ajuar familiar que después de las nupcias pasa en la práctica a ser patrimonio del hombre. Particularmente creo que aun quedan muchas por lo que me inclino a creer lo que dice Dori Alcalá Bayona.
Ahora voy a contaros una anécdota vivida hace ya muchos y que confirma lo de la Virgen como remedio, al menos parcial, a nuestros males:
Hace como digo muchos años, estaba el "Follaperras" con una sobera melopea en el Avenida. Mira por donde aquella noche la dió por criticar. con un lenguaje que dejaba mucho que desear, a todo y a todos, no dejando pasar por alto al copón, algunos santos y a la corte celestial entera. Acertó a ponerse en la puerta del bar, no se sabe si casualmente o avisado por alguien, el Cabo Cruz, de aquella jefe de la Guardia Municipal, el que aguzó sus oidos tratando de entender lo que el tal "follaperras"trataba de hacer valer con sus murmullos de beodo. Ocurrfió que de pronto el b orracho se dió cuenta de la presencia del policia y de alguna forma tomo conciencia de que lo que estaba expresando estaba reñido con las leyes del momento, que prohibian la blasfemia y el lenguaje soez en lugares públicos. Viendo lo que se le venía encimo opto por callar. Agachó la cabeza sobre la barfra del mostrador, miró de reojo en su contorno al mismo tiempo que levantando la voz dijo:! Arriba España, Viva Franco y... Viva la Virgen de Tíscar!, diciendo entonces al que tenía al lado;-que me encierre ahora si tie cojones. Esta vez Joaquín Cruz la dejo pasar

Pues hace aproximadamente unos cuarenta años amigo "quisquillas": creo que te refieres a Manolo "perras", lo del folla no recuerdo que fuese así, así como tampoco recuerdo es que fuese blasfemo y soez, pero si estaba muy preocupado por la "Manola"que no la quería vender de ninguna de las maneras y también recuerdo que al final un Viernes Santo la paliza se la dieron y casi lo mandan al otro mundo.
Una muestra brutal del sistema, que se ensañaba con los mas débiles y no dudaba en demostrarlo, incluido el tema referido por Dori Alcalá.
Como no soy muy de santos y vírgenes, no voy a entrar en el tema por no herir la devocionalidad de mas de uno/a.

No amigo Ramón, quizás esté equivocado en materia de apodos, aunque creo que a este elemento lo llamaban Follaperras. Yo también me acuerdo del palizón que Pedro Dimas proporcionó a Perras un dia de Viernes Santo y que exaltó los ánimos de mucha gente. entre ellos de Carlos Sánchez que reprimió duramente al jefe de los gendarmes locales. El caso que yo cuento data de principio de los años 70, siendo ya Joaquín Cruz jefe de la Plicá Municipal.
Bien recuerdo a Perras y sus grandes borracheras, pero que nunca utilizó la blasfemina ni la palabra soez en sus monológos. Digo monólogos, por que si te topabas con él no te dejaba mover la lengua, "la cruz parroquial santa", Don Manuel ese santo" "La Virgen de Tíscar, esa si que, esa si que..."y asi el hombre, dando traspiés se iba a su casa. A este le tenía aprecio el pueblo entero, menos Tomás Cerrillo que decía de él que era un beato

Que buena persona Manolo y su mujer y buenos vecinos, su pecado fue cagarse en dios en una procesión de viernes santo, porque creía que se caía su cristo, su Nazareno al que siempre acompañaba, en aquel trono viejo de ruedas de hierro, a el le dieron la paliza del siglo, ya que nunca mas camino bien y a un familiar mió que en la guerra estuvo con los que ganaron, mientras se cagaba en madre que parió a todos los municipales y guardia civil por lo que le hicieron a su amigo y con su borrachera de turno no le hacían nada, sino que le acompañaban a su casa a dormir, (los insultos decían así: hijos de putas yo he ganao la guerra para que hagáis esto a mi amigo). El gran lolo descanse en paz y seguro esta con su nazareno que eso, no se lo pudieron quitar. Saludos Ju.