QUESADA: ¡joder con la comparación!...

Estoy con Juanillo con lo del chiste de la república. Que nos importa al pueblo quien nos mangonea, si al fín y al cabo son todos iguales, los mismos perros con diferentes collares. Que me importa a mi darle de comer a un presidente o a un rey, si ninguno de ellos se preocupa de si yo como o no tengo para comer. A ver si acabamos ya con tanta tontería de colorines, que esto parece un cuento para niños chicos. Yo no soy roja, ni blanca, ni gualda, ni de color violeta. Me importa un bledo quien dirija esta caverna de Ali Babá siempre que no se olviden que para explotar un ganado hay que cuidarlo, procurar que tenga pienso, agua, y condiciones de vida adecuadas y salubres. Que no le falte un techo para resguardarse ni un espacio para crecer sano. Por lo demás, que nos vayan esquilando y luego nos vendan para carne, es algo en lo que poco podemos intervenir tal y como lo tienen montado los unos y los otros.
En estos momentos se trata de hacerles entender eso. Más adelante, cuando el hombre evolucione, ya podremos hablar de ser libres... O no...

¡joder con la comparación!
pero al fin y al cabo es lo que somos: ovejitas domesticadas, y si se nos ocurre balar, pues nos mandan a los antidisturbios y palos que te crió.