Es dificil mantener una conversación con alguién que no lee lo que el otro escribe.
Entiendo que sea un fastidio no tener un campo de futbol, pero lo que debes entender es que por mucho campo de futbol que tengais, el niño no va a ser un Messi si lo que le falta es la ilusión. La mayoría de los grandes genios del futbol se han hecho en una playa o en un barrio de mala muerte donde no tenían nada que se pareciera minimamente a un campo deportivo. Veanse Pelé o Maradona...
La cultura no se inculca solamente leyendo. Los jóvenes saben también escuchar, sin embargo si el mensaje que se les envía es deprimente, así lo reciben. Si en la vida de los padres todo es de color negro, así lo van a percibir los hijos. Si todo son envidias, ellos no van a estar nunca satisfechos con lo que tienen. Visto desde el pesimismo, nunca vamos a tener todo lo que tenga el vecino, porque cuando Quesada tenga el campo de futbol que tiene el pueblo de al lado, va a querer el centro comercial que tienen los de Jaén y cuendo lo tenga, va a querer el complejo lúdico que tienen los de Madrid, y así hasta el infinito. Es un ejemplo, pero así es como actuan la mayoría. Hay que enseñar a los hijos a valorar lo que tienen. No se trata de no luchar por mejorar las condiciones de vida que cada uno tiene, se trata de no pasarse la vida como un condenado para pagar la mejor lápida del cementerio.
Hay que hacer hincapié en los valores humanos y no vivir por obtener tan solo valores materiales porque eso no es vida. La cultura no solo está en los libros, está en todas partes si se abren los ojos y se escucha y se comparte con la gente con buenas maneras.
Por otra parte, algunos quieren que los hijos les saquen del anonimato ya sea dando patadas a una pelota o siendo una eminencia, tan solo para ensalzar su ego. Los hijos no nos deben nada. Nosotros les debemos a ellos el guiarles para evitar que caigan en nuestros mismos errores.
Entiendo que sea un fastidio no tener un campo de futbol, pero lo que debes entender es que por mucho campo de futbol que tengais, el niño no va a ser un Messi si lo que le falta es la ilusión. La mayoría de los grandes genios del futbol se han hecho en una playa o en un barrio de mala muerte donde no tenían nada que se pareciera minimamente a un campo deportivo. Veanse Pelé o Maradona...
La cultura no se inculca solamente leyendo. Los jóvenes saben también escuchar, sin embargo si el mensaje que se les envía es deprimente, así lo reciben. Si en la vida de los padres todo es de color negro, así lo van a percibir los hijos. Si todo son envidias, ellos no van a estar nunca satisfechos con lo que tienen. Visto desde el pesimismo, nunca vamos a tener todo lo que tenga el vecino, porque cuando Quesada tenga el campo de futbol que tiene el pueblo de al lado, va a querer el centro comercial que tienen los de Jaén y cuendo lo tenga, va a querer el complejo lúdico que tienen los de Madrid, y así hasta el infinito. Es un ejemplo, pero así es como actuan la mayoría. Hay que enseñar a los hijos a valorar lo que tienen. No se trata de no luchar por mejorar las condiciones de vida que cada uno tiene, se trata de no pasarse la vida como un condenado para pagar la mejor lápida del cementerio.
Hay que hacer hincapié en los valores humanos y no vivir por obtener tan solo valores materiales porque eso no es vida. La cultura no solo está en los libros, está en todas partes si se abren los ojos y se escucha y se comparte con la gente con buenas maneras.
Por otra parte, algunos quieren que los hijos les saquen del anonimato ya sea dando patadas a una pelota o siendo una eminencia, tan solo para ensalzar su ego. Los hijos no nos deben nada. Nosotros les debemos a ellos el guiarles para evitar que caigan en nuestros mismos errores.