Buenas tardes a tod@s.
Que no, amigo Salaria, que no… que estamos cerca… lo que pasa es que por circunstancias médicas he tenido que bajar a Granada y no he podido estar presente en nuestra casa durante esta semana, pero ya estoy aquí y reanudo mis saludos más o menos cotidianos a todos los amigos. Y no creas que no estamos todos tentados de salir corriendo, pues cuando Verain toma la vena poética, nos recuerda al bardo de los comics de Astérix, además de que la práctica de ese terrorismo literario que tú dices, nos acojo…a. Pero en fin, tampoco pongamos al hombre como un guiñapo, que se desanima y eso no es bueno, porque puede desembocar en una depresión como un caballo.
Ay, ay, ay…amigo Forastero, que seguro que Verain te saludó el día de San Isidro. Lo que yo creo que pasó es que él te saludó sin hacer gestos ostensibles y sin mover los labios, pero estoy seguro que te saludó de corazón. No se lo tomes en cuenta, que ya nos saluda todos los días. Y otra cosa, tú no hagas caso a los lenguajes floridos ni a las palabras chirriantes que utilicemos, que a veces podemos usar la prosa o la poesía de tal forma que confundamos o despistemos al auditorio. Mira lo que le pasó a un miembro de un teatro ambulante que iba por los pueblos entreteniendo a la gente representando obras de los clásicos y recitando poesías. Cuando recitó a Santa Teresa con aquello de “vivo sin vivir en mí, y tan alta vida espero, que muero porque no muero…” se levantó de golpe un baturro chillando “ ¡La gallina…es la gallina!” cual si hubiera adivinado un acertijo.
Eh, Zaidín, no te digo nada, pero vaya alegrón me he llevado este fin de semana con lo que tú ya sabes (es por no molestar, vayan a saber que estoy hablando de FÚTBOL) jajajajajajajajaja. ¡Aupa el Granada, y Arriba el Jaén!
Bueno, amigo Verain, sobre tu reflexión en relación a los partidos, las lenguas vehiculares y a los charnegos tuneados (léanse Montilla, Carod, etc.), pues decirte que llevas toda la razón, pero esto es un tema que está muy relacionado con la barriga llena y la cartera repleta. Si una comunidad tuviera alguna necesidad en infraestructuras, industria, centros tecnológicos, etc., pues no estaría tan preocupada por un tema tan banal, superfluo y caro como el de las lenguas vehiculares, pues esto y la necesidad de crear 17+2 parlamentos autonómicos, nos llevan a soportar un costo tremendo, lo cual frena nuestro desarrollo como país, entre otras cosas más, claro. Yo no digo que no haya una descentralización más o menos grande, lo que sí quiero es que no haya una diversidad legal tan amplia entre unas y otras comunidades, pues supone un gasto superfluo ya desde su propia elaboración (se necesitan cientos de cabezas pensantes para llegar a la conclusión a la que llegarían una docena de ellas). Francia, que es una república, no tiene necesidad de tener más que un parlamento y un senado (y eso que una república, por definición, es una agrupación de federaciones o estados federales), utilizando las prefecturas, o diputaciones, para vertebrar su territorio.
Bueno, pero dejemos esto, que es tedioso. En esto me pasa como en la religión, que pienso que es un asunto personal de cada uno y no un asunto de estado.
Oye, y en cuanto a los programas televisivos que se emiten en este, nuestro país, decirte que los romanos ya utilizaban la frase “al pueblo pan y circo”, con lo que los dos motivos capaces de generar disturbios, una vez satisfechos, se desvanecían. No hay más que ver la programación que algunas cadenas nos ofrecen y los presentadores y personajillos invitados. Si dejáramos de ver ese tipo de programas, seguramente dormiríamos mejor. No es seguro, pero podemos intentarlo.
Venga, os dejo por hoy. Un abrazo a tod@s.
Que no, amigo Salaria, que no… que estamos cerca… lo que pasa es que por circunstancias médicas he tenido que bajar a Granada y no he podido estar presente en nuestra casa durante esta semana, pero ya estoy aquí y reanudo mis saludos más o menos cotidianos a todos los amigos. Y no creas que no estamos todos tentados de salir corriendo, pues cuando Verain toma la vena poética, nos recuerda al bardo de los comics de Astérix, además de que la práctica de ese terrorismo literario que tú dices, nos acojo…a. Pero en fin, tampoco pongamos al hombre como un guiñapo, que se desanima y eso no es bueno, porque puede desembocar en una depresión como un caballo.
Ay, ay, ay…amigo Forastero, que seguro que Verain te saludó el día de San Isidro. Lo que yo creo que pasó es que él te saludó sin hacer gestos ostensibles y sin mover los labios, pero estoy seguro que te saludó de corazón. No se lo tomes en cuenta, que ya nos saluda todos los días. Y otra cosa, tú no hagas caso a los lenguajes floridos ni a las palabras chirriantes que utilicemos, que a veces podemos usar la prosa o la poesía de tal forma que confundamos o despistemos al auditorio. Mira lo que le pasó a un miembro de un teatro ambulante que iba por los pueblos entreteniendo a la gente representando obras de los clásicos y recitando poesías. Cuando recitó a Santa Teresa con aquello de “vivo sin vivir en mí, y tan alta vida espero, que muero porque no muero…” se levantó de golpe un baturro chillando “ ¡La gallina…es la gallina!” cual si hubiera adivinado un acertijo.
Eh, Zaidín, no te digo nada, pero vaya alegrón me he llevado este fin de semana con lo que tú ya sabes (es por no molestar, vayan a saber que estoy hablando de FÚTBOL) jajajajajajajajaja. ¡Aupa el Granada, y Arriba el Jaén!
Bueno, amigo Verain, sobre tu reflexión en relación a los partidos, las lenguas vehiculares y a los charnegos tuneados (léanse Montilla, Carod, etc.), pues decirte que llevas toda la razón, pero esto es un tema que está muy relacionado con la barriga llena y la cartera repleta. Si una comunidad tuviera alguna necesidad en infraestructuras, industria, centros tecnológicos, etc., pues no estaría tan preocupada por un tema tan banal, superfluo y caro como el de las lenguas vehiculares, pues esto y la necesidad de crear 17+2 parlamentos autonómicos, nos llevan a soportar un costo tremendo, lo cual frena nuestro desarrollo como país, entre otras cosas más, claro. Yo no digo que no haya una descentralización más o menos grande, lo que sí quiero es que no haya una diversidad legal tan amplia entre unas y otras comunidades, pues supone un gasto superfluo ya desde su propia elaboración (se necesitan cientos de cabezas pensantes para llegar a la conclusión a la que llegarían una docena de ellas). Francia, que es una república, no tiene necesidad de tener más que un parlamento y un senado (y eso que una república, por definición, es una agrupación de federaciones o estados federales), utilizando las prefecturas, o diputaciones, para vertebrar su territorio.
Bueno, pero dejemos esto, que es tedioso. En esto me pasa como en la religión, que pienso que es un asunto personal de cada uno y no un asunto de estado.
Oye, y en cuanto a los programas televisivos que se emiten en este, nuestro país, decirte que los romanos ya utilizaban la frase “al pueblo pan y circo”, con lo que los dos motivos capaces de generar disturbios, una vez satisfechos, se desvanecían. No hay más que ver la programación que algunas cadenas nos ofrecen y los presentadores y personajillos invitados. Si dejáramos de ver ese tipo de programas, seguramente dormiríamos mejor. No es seguro, pero podemos intentarlo.
Venga, os dejo por hoy. Un abrazo a tod@s.