1ª Parte...
Buenas Noches tengan Vuestras Mercedes
Por favor, permitidme que os recuerde este párrafo que alguien escribió con la idea de que le sirviera de gabardina para protegerse de la lluvia, sin saber que a mí me serviría de bastón de apoyo para andar por estos vericuetos literarios:
“Disentir de un acuerdo municipal, aunque no es infrecuente, tampoco es grato; pero difundir ideas mediante un escrito, es un derecho constitucional”.
Digo yo que también servirá para disentir de cualquier tema sin tener que ser necesariamente un acuerdo municipal. Y puestos a pedir, espero que me sirva por si, involuntariamente, debido a mi ignorancia sobre leyes y normas, me meto en algunos de los charcos literarios que no veo por el camino hasta que se me mojan los pantalones y calzado. Procuraré estar atento para no meter la pata “en el charco” y que pueda salpicar a alguien, pero si lo hago, lo haré con el máximo de respeto. Y que conste que no es cuestión de hacer “daño” y luego pedir perdón, eso sería muy fácil, pero nada ético por mi parte. Mi propósito es decir y expresar mis ideas y opiniones libremente sin cortapisas como lo pueda hacer cualquier sabioteño de a pie en alguno de los corrillos de “Las Barandas” (fisicas), aunque a mí me guste hacerlo a través de mi binomio preferido: La Educación y el Respeto.
Como bien decía… había titulado este articulo: Nuestra Revista Puerta de la Villa, y espero seguir anteponiendo el pronombre posesivo “Nuestra” cuando me dirija a dicha revista, lo digo para que no deis lugar a que lo tenga que sustituir por el de “Vuestra”, ya que se os puede quedar en el armario sin venderla porque al precio que le habéis puesto de 2 € creo que las ventas se han resentido un poco. ¡Y digo yo!. ¿Es preferible dejarla en el armario, o venderla? Por favor, no quiero que me tachéis de mísero por comentar siquiera un tema tan insignificante como es gastarse 2 € en una revista del pueblo en una feria. Naturalmente que es de miserables pensar esto, pero yo le preguntaría a la persona que ha vendido revistas, cuantas personas de las que han comprado no han dicho algo como: ¿a 2 €? Os habéis pasado. Pues entonces dame una nada más. Y ahí es donde está el quid de la cuestión, que las revistas la compra la gente para sus familiares y amigos que están fuera de nuestro pueblo. El año pasado compró una mujer delante de mí 8 revistas, me gustaría saber cuántas ha comprado este año. Yo también compraba bastantes, de ahí que haya caído en este asunto, pero para el año siguiente, (D. M.) los prepararé para que entiendan que se les ha acabado el chollo y buscaremos otra opción bastante buena como es la imprimirla desde el foro de mi “buen Amigo” Pepe y así eliminar gastos que no son de primera necesidad.
Si, ya sé que es a todo color, pero eso es un lujo que habéis traído en el momento menos propicio, más… cuando ya no escriben las primeras figuras de nuestra literatura local, unos por diversos motivos, y otros por cuestión de principios. ¿Principios? ¿Ahora aparecen los principios? ¿Es que en años anteriores, cuando pluma propia y otras plumas repetían por separado noticias y artículos suyos en distintas páginas de la Revista y del periódico… no existían los principios? Los principios también se utilizan para otras cosas, como por ejemplo, para hacer públicas posturas y bandos en el tema del convento, …pero desde hace tiempo, porque… a partir de ahora ya no tiene gracia. Lástima de no vivir 45 años más para poder leer el Diario de una Feria, al estilo que nos lo ofrece actualmente en el Rincón del Café otro “amigo” llamado Antonio Lara Pozuelo (catedrático español que vive y ejerce en Suiza desde hace muchos años) que desde el día 6 del presente mes (coincidiendo en día de semana y mes del año 1964) y en capítulos diarios nos lleva intrigados contándonos las peripecias de unos jóvenes que viajaban en autostop de Andújar-Almería a Andorra y regreso.
D. José, intento por todos los medios que todo lo que comento no sea una crítica, y si no tiene más remedio que parecerlo, al menos, que sea constructiva. He visto en las páginas de los sumarios de revistas anteriores que había bastantes redactores en su elaboración, entre los que usted no estaba, y en la de este año le han dejado como único espada. ¿Qué pasa, que no hacía falta tanta gente, o que usted se lo lleva de calle, más, cuando antes no lo había hecho? Si, también he visto en la última página el agradecimiento a una relación de colaboradores que han participado, y que años anteriores nunca han mencionado. También he comprobado que Rosa es una de sus mejores aliadas en escribir artículos, y que es de agradecer cuando se tienen tantas páginas que rellenar, por eso entiendo que a veces queramos (yo no, a mi me sale sin querer) extendernos y ocupar el máximo de espacio con nuestros artículos, pero eso no siempre resulta, porque en el comentario de la jubilación de los dos “Aguaciles Antonios”, por extendernos más de lo “estrictamente noticiable”, no se puede hacer adornando y diciendo cosas que no se sostienen por si solas. ¡Ojo! Que no estoy diciendo nada en contra de las personas, que pueden ser las mejores, de hecho no sé si alguno de ellos ha puesto multa alguna, aunque alguna vez no hubiera estado de más, y con ello tampoco hubieran dejado de ser buenas personas. Digo esto porque siempre vienen a la revista las jubilaciones de “según ustedes” las personas más representativas del pueblo, a la que usted también une en este número, como no podía ser de otra manera, puesto que coincide, la de D. Agustín. Y me parece muy bien, que no estoy diciendo que no lo merezca ninguno de ellos, cada cual ha desarrollado su labor en el pueblo, y para todos habrá habido sonrisas y lagrimas en esas jubilaciones, pero…. cojones ¿Cuándo va a coincidir que se jubile en el pueblo una persona más humilde (para ustedes, e igual de importante para mí) como por ejemplo, un agricultor, que le lleven a estas páginas, a las páginas de la revista de su pueblo, que por una vez en su vida se hable de él/ella en un sitio.
Continua...
Buenas Noches tengan Vuestras Mercedes
Por favor, permitidme que os recuerde este párrafo que alguien escribió con la idea de que le sirviera de gabardina para protegerse de la lluvia, sin saber que a mí me serviría de bastón de apoyo para andar por estos vericuetos literarios:
“Disentir de un acuerdo municipal, aunque no es infrecuente, tampoco es grato; pero difundir ideas mediante un escrito, es un derecho constitucional”.
Digo yo que también servirá para disentir de cualquier tema sin tener que ser necesariamente un acuerdo municipal. Y puestos a pedir, espero que me sirva por si, involuntariamente, debido a mi ignorancia sobre leyes y normas, me meto en algunos de los charcos literarios que no veo por el camino hasta que se me mojan los pantalones y calzado. Procuraré estar atento para no meter la pata “en el charco” y que pueda salpicar a alguien, pero si lo hago, lo haré con el máximo de respeto. Y que conste que no es cuestión de hacer “daño” y luego pedir perdón, eso sería muy fácil, pero nada ético por mi parte. Mi propósito es decir y expresar mis ideas y opiniones libremente sin cortapisas como lo pueda hacer cualquier sabioteño de a pie en alguno de los corrillos de “Las Barandas” (fisicas), aunque a mí me guste hacerlo a través de mi binomio preferido: La Educación y el Respeto.
Como bien decía… había titulado este articulo: Nuestra Revista Puerta de la Villa, y espero seguir anteponiendo el pronombre posesivo “Nuestra” cuando me dirija a dicha revista, lo digo para que no deis lugar a que lo tenga que sustituir por el de “Vuestra”, ya que se os puede quedar en el armario sin venderla porque al precio que le habéis puesto de 2 € creo que las ventas se han resentido un poco. ¡Y digo yo!. ¿Es preferible dejarla en el armario, o venderla? Por favor, no quiero que me tachéis de mísero por comentar siquiera un tema tan insignificante como es gastarse 2 € en una revista del pueblo en una feria. Naturalmente que es de miserables pensar esto, pero yo le preguntaría a la persona que ha vendido revistas, cuantas personas de las que han comprado no han dicho algo como: ¿a 2 €? Os habéis pasado. Pues entonces dame una nada más. Y ahí es donde está el quid de la cuestión, que las revistas la compra la gente para sus familiares y amigos que están fuera de nuestro pueblo. El año pasado compró una mujer delante de mí 8 revistas, me gustaría saber cuántas ha comprado este año. Yo también compraba bastantes, de ahí que haya caído en este asunto, pero para el año siguiente, (D. M.) los prepararé para que entiendan que se les ha acabado el chollo y buscaremos otra opción bastante buena como es la imprimirla desde el foro de mi “buen Amigo” Pepe y así eliminar gastos que no son de primera necesidad.
Si, ya sé que es a todo color, pero eso es un lujo que habéis traído en el momento menos propicio, más… cuando ya no escriben las primeras figuras de nuestra literatura local, unos por diversos motivos, y otros por cuestión de principios. ¿Principios? ¿Ahora aparecen los principios? ¿Es que en años anteriores, cuando pluma propia y otras plumas repetían por separado noticias y artículos suyos en distintas páginas de la Revista y del periódico… no existían los principios? Los principios también se utilizan para otras cosas, como por ejemplo, para hacer públicas posturas y bandos en el tema del convento, …pero desde hace tiempo, porque… a partir de ahora ya no tiene gracia. Lástima de no vivir 45 años más para poder leer el Diario de una Feria, al estilo que nos lo ofrece actualmente en el Rincón del Café otro “amigo” llamado Antonio Lara Pozuelo (catedrático español que vive y ejerce en Suiza desde hace muchos años) que desde el día 6 del presente mes (coincidiendo en día de semana y mes del año 1964) y en capítulos diarios nos lleva intrigados contándonos las peripecias de unos jóvenes que viajaban en autostop de Andújar-Almería a Andorra y regreso.
D. José, intento por todos los medios que todo lo que comento no sea una crítica, y si no tiene más remedio que parecerlo, al menos, que sea constructiva. He visto en las páginas de los sumarios de revistas anteriores que había bastantes redactores en su elaboración, entre los que usted no estaba, y en la de este año le han dejado como único espada. ¿Qué pasa, que no hacía falta tanta gente, o que usted se lo lleva de calle, más, cuando antes no lo había hecho? Si, también he visto en la última página el agradecimiento a una relación de colaboradores que han participado, y que años anteriores nunca han mencionado. También he comprobado que Rosa es una de sus mejores aliadas en escribir artículos, y que es de agradecer cuando se tienen tantas páginas que rellenar, por eso entiendo que a veces queramos (yo no, a mi me sale sin querer) extendernos y ocupar el máximo de espacio con nuestros artículos, pero eso no siempre resulta, porque en el comentario de la jubilación de los dos “Aguaciles Antonios”, por extendernos más de lo “estrictamente noticiable”, no se puede hacer adornando y diciendo cosas que no se sostienen por si solas. ¡Ojo! Que no estoy diciendo nada en contra de las personas, que pueden ser las mejores, de hecho no sé si alguno de ellos ha puesto multa alguna, aunque alguna vez no hubiera estado de más, y con ello tampoco hubieran dejado de ser buenas personas. Digo esto porque siempre vienen a la revista las jubilaciones de “según ustedes” las personas más representativas del pueblo, a la que usted también une en este número, como no podía ser de otra manera, puesto que coincide, la de D. Agustín. Y me parece muy bien, que no estoy diciendo que no lo merezca ninguno de ellos, cada cual ha desarrollado su labor en el pueblo, y para todos habrá habido sonrisas y lagrimas en esas jubilaciones, pero…. cojones ¿Cuándo va a coincidir que se jubile en el pueblo una persona más humilde (para ustedes, e igual de importante para mí) como por ejemplo, un agricultor, que le lleven a estas páginas, a las páginas de la revista de su pueblo, que por una vez en su vida se hable de él/ella en un sitio.
Continua...