Cada vez que voy a carrasco el corazon se me alegra y recuerdo montones de cosas de mi infancia aquellos veranos tan maravillosos trillando en la era y luego por la noche durmiendo en la parva, aquellos baños en el charco del molino o en las albercas de rocieno, son recuerdos que nunca se me borraran de la memoria.jose.