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Las luminarias. ¡Qué lástima que desaparecieran! El progreso, como a tantas cosas, se las llevó, por aquello de que se quebrantaba el pavimento de las calles.
Para mí es algo de lo que recuerdo con mas nostalgia. La fiesta de las luminarias empezaba cuando nos íbamos al monte a por romeros, porque ya cogiéndolos disfrutábamos de lo lindo. Llegábamos al pueblo con el haz a cuestas, y, luego, encendíamos las luminarias, por todas las calles. Para mí eran noches de embrujo, en las que lo pasaba maravillosamente, y que siempre tendré en el recuerdo. Cuando las llamas se difuminaban, daban paso al rescoldo, y, a su alrededor, nos sentábamos los vecinos, charlando amigablemente, hasta altas horas, contando chistes o historias mil. Muchas veces asábamos patatas, metiéndolas entre las brasas, que, luego, regadas con el vino de una bota, o de la clásica botella de cristal del pito estrecho, degustábamos y sabían a gloria.
No solo las celebrábamos en San Andrés y Santa Lucía, como dice Javier; también en la Candelaria, San Blas, San Antón...
Esta noche, recordándolas, he vuelto a disfrutar.
Si, Sileña, Nicanor, Javier, gracias por volver. Sefa, Pilar, Joseles: A vosotros os espero también. María, no te canses nunca; después de unas cosas u otras, acabamos volviendo, los demás.
Saludos para todos.
Para mí es algo de lo que recuerdo con mas nostalgia. La fiesta de las luminarias empezaba cuando nos íbamos al monte a por romeros, porque ya cogiéndolos disfrutábamos de lo lindo. Llegábamos al pueblo con el haz a cuestas, y, luego, encendíamos las luminarias, por todas las calles. Para mí eran noches de embrujo, en las que lo pasaba maravillosamente, y que siempre tendré en el recuerdo. Cuando las llamas se difuminaban, daban paso al rescoldo, y, a su alrededor, nos sentábamos los vecinos, charlando amigablemente, hasta altas horas, contando chistes o historias mil. Muchas veces asábamos patatas, metiéndolas entre las brasas, que, luego, regadas con el vino de una bota, o de la clásica botella de cristal del pito estrecho, degustábamos y sabían a gloria.
No solo las celebrábamos en San Andrés y Santa Lucía, como dice Javier; también en la Candelaria, San Blas, San Antón...
Esta noche, recordándolas, he vuelto a disfrutar.
Si, Sileña, Nicanor, Javier, gracias por volver. Sefa, Pilar, Joseles: A vosotros os espero también. María, no te canses nunca; después de unas cosas u otras, acabamos volviendo, los demás.
Saludos para todos.
HOLA GENITO YTAMBIEN ATODOS LOS FOREROS, PARECE SER K ESTAMOS RESUCITANDO TODOS PUES YA SE EMPIEZA A ANIMAR ESTO, HAY UN DICHO K DICE DONDE VEAS CIEN VES TU TAMBIEN, CON RESPECTO ALOS CARROS DECIR, K EL MEJOR CARRO K HABIA EN SILES ERA EL K HIZO MI TIO PACO.. K EMPAZ DESCANSE... PUES AL CARRO LE METIMOS 700 Kg. DE ACEITUNA LLEVABA BALLESTAS DE AMORTIGUADORES ASIENTO PARA EL CONDUCTOR. FRENOS, ETC. ETC. UNA AUTENTICA JOYA SUPONGO K ALGUIEN SE ACORDARA DE DICHO CARRO. BUENO YA TENIA YO GANAS DE ASOMARME POR AKI.. SALUDOS SIKEÑOS Y SILEÑAS
Yo sí me acuerdo de estos carros, y cuando los veía bajar por la calle del colegio, cargados de chiquillos, me entraba el pánico porque me creía que me iban a pillar. La dirección era una cuerda atada a los dos lados del eje delantero y a la cuesta abajo cogían una velocidad considerable y los frenos eran los pies de los chiquillos. Yo no me fiaba mucho (era muy cobardica) y me apartaba todo lo que podía.
Debíais de pasarlo muy bien.
Debíais de pasarlo muy bien.
Hola! os acordais para pascua cuando ivamos a comenos el ornazo con un huevo en medio de colores, por detras del deposito del agua, que recuerdos. yo era muy pekeña pero me acuerdo.
Y para San Marcos ¡qué día más bonito y más alegre!