Una abuelita de 98 años y un abuelito de 105 visitan al médico:
-Entonces... nosotros ya no podemos hacer el amor?
-No señora, si ustedes lo hacen corren el riesgo de morirse. Es mejor que duerman en cuartos separados.
Ya en casa, esa misma noche, tocan a la puerta del abuelito.
- ¿Quien es?
-Una viejecita suicida!
-Entonces... nosotros ya no podemos hacer el amor?
-No señora, si ustedes lo hacen corren el riesgo de morirse. Es mejor que duerman en cuartos separados.
Ya en casa, esa misma noche, tocan a la puerta del abuelito.
- ¿Quien es?
-Una viejecita suicida!