En ese mismo año 1917 vive en la calle Tetuán (un par de años antes vivía en la calle Bailén) María Serrano Henares, que tiene 37 años y lleva 24 en Linares y está casada con un linarense, Salvador García Espinosa, con el que tiene dos hijos, Antonio y Francisca.
María llegó a Linares con su hermano Francisco, cuatro años mayor que ella, y con su padre, Domingo Serrano Garrido (40 años), viudo.
María llegó a Linares con su hermano Francisco, cuatro años mayor que ella, y con su padre, Domingo Serrano Garrido (40 años), viudo.
Rectifico: No son 24, sino 27 los años que lleva María en Linares en 1917. 24 años antes es cuando aparece por primera vez en el censo de Linares, donde se dice que vive con su padre, jornalero viudo que tiene 40 años y con su hermano y que llevan tres años en Linares. Ella vuelve a aparecer en los padrones de 1914 y 1917, pero ni su padre ni su hermano vuelven a aparecer.
No he encontrado el nombre de la madre de Francisco y María Serrano Henares y no sé si tiene alguna relación con Claro Henares Castillo, que es de Siles y en 1896 lleva siete años en Linares (es decir, que llegó cuando los Serrano Henares o poco antes) y está casado con su paisana Juana Rodríguez López, con la que tiene dos hijos, Emilio y María (ella nacida ya en Linares).
Tampoco sé si tiene algo que ver con Constanza Henares Olivares, que en 1894 tiene 49 años, vive en la calle Riscos, lleva 17 años en Linares y está casada con Luciano Martínez Cano. Todos de Siles, por supuesto, menos su hijo Jorge, de 14 años.
Tampoco sé si tiene algo que ver con Constanza Henares Olivares, que en 1894 tiene 49 años, vive en la calle Riscos, lleva 17 años en Linares y está casada con Luciano Martínez Cano. Todos de Siles, por supuesto, menos su hijo Jorge, de 14 años.
Vecinas de Luciano y Constanza en esa casa de la calle Riscos eran cuatro familias más de Siles.
Pascual Salas y su mujer Nicasia de Gracia Piqueras, que en 1894 llevaban diez años en Linares y tenían dos hijos, Juan y Francisco, ambos nacidos en Siles.
Anastasio Lumbreras Garrido y su mujer Martina López Rodríguez, que llevaban ocho años en Linares y tenían un hijo ya con 17 años, Ángel, jornalero como su padre y como la mayoría de los sileños que por esos años llegaron a Linares.
El matrimonio formado por los sileños Matías Millán Olivares y Ángela Sarrión López, que llevan tres años en Linares, adonde llegaron ya con cinco hijos, de los que los dos mayores están trabajando en la mina.
Y, finalmente, Carmen Fernández Olivares y su marido Cipriano Martínez Garrido, que tienen dos hijas nacidas en Siles, Victoria (17 años) y Francisca (11).
Pascual Salas y su mujer Nicasia de Gracia Piqueras, que en 1894 llevaban diez años en Linares y tenían dos hijos, Juan y Francisco, ambos nacidos en Siles.
Anastasio Lumbreras Garrido y su mujer Martina López Rodríguez, que llevaban ocho años en Linares y tenían un hijo ya con 17 años, Ángel, jornalero como su padre y como la mayoría de los sileños que por esos años llegaron a Linares.
El matrimonio formado por los sileños Matías Millán Olivares y Ángela Sarrión López, que llevan tres años en Linares, adonde llegaron ya con cinco hijos, de los que los dos mayores están trabajando en la mina.
Y, finalmente, Carmen Fernández Olivares y su marido Cipriano Martínez Garrido, que tienen dos hijas nacidas en Siles, Victoria (17 años) y Francisca (11).
En 1918 vive en el número 7 de la calle Hernán Cortés de Linares la sileña Josefa Millán Sarrión, hija de Matías Millán y Ángela Sarrión (este apellido alguna vez aparece como Carrión) Josefa tiene 30 años, llegó a Linares con un añito y está casada con el jornalero linarense Rafael Belmonte Martínez. Tiene tres hijos, Pedro, Carmen y Matías y vive con ellos la madre de Josefa, Ángela, que tiene 64 años y está viuda.
En el 2 de la misma calle vive en 1918 un matrimonio joven de Siles, Ignacio Martínez Lumbreras, carretillero y su mujer, Inocenta Rodríguez Ballester. Tienen veintipocos años, llegaron a Linares el año pasado y tienen un nene de seis meses, Ramón.
Aquí si creo que has encontrado conocidos. Sería demasiada coincidencia, pero los abuelos de Diego, Anto y Francis Plaza se llamaban Ignacio Martínez Lumbreras (el Ciprianillo) e Inocenta Rodríguez Ballester. Te lo confirmaré en cuanto que hable con Ignacia, la viuda de Antonio Plaza, que es hija de aquel matrimonio. De quién también eran hijas la Loles de Perenales, y la Tenta de Gregoriete. (Esta, Inocenta, por su madre; e Ignacia, por su padre).
Me alegro mucho de que vaya saliendo gente conocida, ahora los abuelos de los Plaza, antes el hermano de la María narciso. Y en facebook una bisnieta me dijo que la Serafina García Abío que puse por aquí es la madre de Merengue, la que vivía en la calle Margarita.
Efectivamente, Ramón, la madre de Merengue era Serafina García Abío.