
La primera vez que visité Sorihuela, subí por éstas escaleras que aparecen en ésta foto y entré en ésta iglesia siendo yo una persona feliz, llena de ilusiones, dando gracias por todo y agradeciendo muchas cosas.
Cierto tiempo después todo ha desaparecido, ya nada es igual y todas las ilusiones se convierten en una tristeza infinita, imposible de describir con palabras, aunque mi amor hacia éste pueblo siempre existirá, hasta el final de mis días.
Cierto tiempo después todo ha desaparecido, ya nada es igual y todas las ilusiones se convierten en una tristeza infinita, imposible de describir con palabras, aunque mi amor hacia éste pueblo siempre existirá, hasta el final de mis días.