VILCHES: Desde que estuve, niña, en La Habana No se me puede...

Desde que estuve, niña, en La Habana
No se me puede olvidar
Tanto Cádiz ante mi ventana, Tacita lejana,
Aquella mañana pude contemplar...
Las olas de la Caleta, que es plata quieta,
Rompían contra las rocas de aquel paseo
Que al bamboleo de aquellas bocas
Allí le llaman El Malecón...
Había coches de caballos, que era por mayo,
Sonaban por la Alameda, por Puerta Tierra,
Y me traían, ay, tierra mía,
Desde mi Cádiz el mismo son...
El son de los Puertos, dulzor de guayaba,
Calabazas, huertos...
Aún pregunto quién me lo cantaba...