VILLANUEVA DEL ARZOBISPO: Imagínensen, aquellos días de trasiego por la carretera...

Imagínensen, aquellos días de trasiego por la carretera del Tranco, cuando familias enteras vivían en los cortijos de las laderas y montañas del espacio territorial de Villanueva del Arzobispo.
Cuando toda esa gente espera con ilusión la llegada de noticias de los hijos que estaban en la mili, o el redacero o el señor que venía con los inventos nuevos aún desconocidos.
Cuando era de vital importancia acercarse a Villanueva a ver como era el funcionamiento de los primeros televisores que hubieron en la zona, y que lujusomente exponía en su escaparate de. César Gallardo.
O esos cargamentos de aceite que la gente compraba en los molinos, que viajaban con los hacinados paquetes y cajas de la baca del viejo autocar.
El ajetreo de la euforia conectada a la ilusión de llegar a Villanueva a comprar o al médico(que por entonces los había y muy buenos), mezclado con la loca risa de las gallinas mezcladas en el autocar.
En fin... Tengo entendido que este autobús tuvo un accidente antes de llegar al Tranco, con la mala fortuna de despeñarse por una de sus inclinadas laderas y morir en el cinco de sus pasajeros.
En la manos de los familiares queda la labor de que (ojalá si me escuchan), recreen la historia de este autobús en un libro, para que los recuerdos no lleguen a perderse jamás, ya que este señor(Marcelino) ya hace unos cuantos años que falleció.
M.L. Villanueva del arzobispo.