El sábado pasado se hizo la elección del Alcalde y de los concejales, entre ellos yo. Seguidamente se hizo una fiesta por invitación del Alcalde, todo lo que allí había estaba pagado por el ayuntamiento, es decir, por todos. Yo estuve como era mi obligación, y me tomé dos cervezas, un trozo de jamón y una aceituna exactamente, ya que a algunos les faltaba mesa para "GLUP-GLUP". Ni me considero, ni los que me conocen me consideran ninguna tragona, sino una trabajadora. Estoy muy orgullosa de ser concejala ... (ver texto completo)