Me contaron el sábado que los comerciantes de la plaza están molestos porque el ayuntamiento no les permite tener mesas en la plaza a partir de las 8 de la tarde ya que a partir de esta hora se restablece el trafico por la plaza y yo digo y los que queramos quedarnos hasta mar tarde que pasa estamos ya como en otros tiempos que nos dicen cuando nos tenemos que ir a dormir o donde tenemos que ir --- yo estaré sentado en una mesa a esa hora y ya veremos quién me echa
Anda que han tardao poco!
Aún faltan 17 días para la feria -contados desde hoy- y, ya hay quien quiere reventarla.
Algunos aún no saben que estamos en democracia y que, cada uno puede hacer lo que quiera pero, siempre, dentro de un orden. Y ese orden, está incluído dentro de unas ordenanzas que, a su vez, están aprobadas por ley y, como la ley está para cumplirla pues, a obedecer o, a pagar las consecuencias. Así de sencillo.
Y si tú quieres estar sentado en una mesa, a esa hora, y el dueño no te dice nada, quien va a pagar las consecuencias directamente, será el dueño del establecimiento que, sabiendo de más que está prohibido, hace caso omiso a una orden del Ayuntamiento. Después, lógicamente, vendrán a decirte que, por favor, despeje la vía pública pues, está prohibido a partir de tal hora sentarse en mitad de la plaza o de la calle. De incumplir tal orden, el agente municipal que esté de servicio, tendrá pleno derecho a realizar los trámites correspondientes, por desacato a la autoridad.
Y, la verdad sea dicha pues, sí, es verdad que estamos como en otros tiempos cuando nos dicen cuándo tenemos que ir a dormir y lo que tú quieras. Es verdad. Y, ¿sabes por qué? Pues porque tenemos una mentalidad de niños chicos que, nos creemos que, con patalear, vamos a conseguir lo que queramos. Y, pegar, no hay que pegar, estoy en desacuerdo total con la violencia pero, de vez en cuando, una colleja, no vendría mal.
¡Hummmmmmmmm! hablando de collejas. Quién pillara ahora un manojito para hacer una tortillita!
Aún faltan 17 días para la feria -contados desde hoy- y, ya hay quien quiere reventarla.
Algunos aún no saben que estamos en democracia y que, cada uno puede hacer lo que quiera pero, siempre, dentro de un orden. Y ese orden, está incluído dentro de unas ordenanzas que, a su vez, están aprobadas por ley y, como la ley está para cumplirla pues, a obedecer o, a pagar las consecuencias. Así de sencillo.
Y si tú quieres estar sentado en una mesa, a esa hora, y el dueño no te dice nada, quien va a pagar las consecuencias directamente, será el dueño del establecimiento que, sabiendo de más que está prohibido, hace caso omiso a una orden del Ayuntamiento. Después, lógicamente, vendrán a decirte que, por favor, despeje la vía pública pues, está prohibido a partir de tal hora sentarse en mitad de la plaza o de la calle. De incumplir tal orden, el agente municipal que esté de servicio, tendrá pleno derecho a realizar los trámites correspondientes, por desacato a la autoridad.
Y, la verdad sea dicha pues, sí, es verdad que estamos como en otros tiempos cuando nos dicen cuándo tenemos que ir a dormir y lo que tú quieras. Es verdad. Y, ¿sabes por qué? Pues porque tenemos una mentalidad de niños chicos que, nos creemos que, con patalear, vamos a conseguir lo que queramos. Y, pegar, no hay que pegar, estoy en desacuerdo total con la violencia pero, de vez en cuando, una colleja, no vendría mal.
¡Hummmmmmmmm! hablando de collejas. Quién pillara ahora un manojito para hacer una tortillita!