¿Desde cuando no paseáis por la sierra de nuestro pueblo? El campo ha aprovechado bien el agua caida y se recupera rapidamentde del incendio. Somos una minoría de aznalcolleros los que aprovechamos la belleza de nuestros parajes. Ultimamente ha irrumpido un elemento que distorsiona nuestro paisaje. Se trata del MURO DE LA ESTUPIDEZ. Resulta que a algún pez gordo de la consejería de medio ambiente se le ha ocurrido la feliz idea de convertir nuestra sierra en una dehesa, sí como lo estáis leyendo: en una DEHESA para meter vacas. Al parecer el tal prohombre, iluminado como el que más, ha pensado que desertificando el campo, impedirá que se prendan los incendios. Las vacas se lo comeran todo. Muerto el perro se acabó la rabia. Ahora si os dais una vuelta, podréis contemplar un horroroso muro de piedra y hormigón con un impacto visual tremendo. Dudo que algo así cuente con el visto bueno del Ayuntamiento, por eso desde aquí lo emplazo a que se interese por el tema, ya que convertir el monte en un erial, no parece la mejor forma de evitar los incendios.