En la
esquina entre la
fachada del Evangelio y la principal se sitúa la
torre-
campanario, que se empezó a construir en el siglo XVI, aunque no se terminó hasta el XIX. Consta de cuatro cuerpos de tamaño decreciente, rematados por un chapitel cubierto con los tradicionales azulejos blancos y azules. Los diferentes pisos están separados mediante el uso de cornisas, adornados en sus
esquinas por pináculos piramidales con ramos de azucenas realizados en forja. Una lápida en la zona inferior nos explica que tanto el
reloj como el chapitel fueron costeados, en 1.893 por las hermanas Carlota y Dolores Quintanilla.