En 1.614 llegó a la población sevillana de
Coria del Río una expedición japonesa al mando de la cual estaba el samurái Hasekura Tsunenaga. Se fundieron con la población y sus descendientes recibieron el apellido "Japón", del que son orgullosos portadores más de seiscientos paisanos en la actualidad. El
pueblo de Coria del Río rinde
homenaje a este personaje con una
estatua, (en la
foto), situada en el
parque Martínez de
León, a orillas del Guadalquivir.