Cada Viernes Santo cuando voy a ver la salida de la Veracruz me hiere ver cómo muchos nazarenos y costaleros de la Hermandad de los Dolores aún no se han quitado la túnica o la ropa de costalero. Peor aún, cuando se trata de una pareja muy cariñosa sentada en la acera con las túnicas aún. Creo que la túnica es algo sagrado para las personas que integran una Hermandad, se considera tan importante que algunos quieren que el día que mueran se les entierre con ella. Creo que las diferentes Juntas de Gobierno de las distintas Hermandades deberían cuidar muy seriamente este aspecto.