aunque no soy loreño, si leo tu poesia, pués desde Almeria soy un ferviente Setefillero, para colmo tengo dos Setefillas en mi Familia, mi mujer y mi hija, y si lees más abajo, el del accidente soy yo, y cada año por lo menos una vez (estamos muy lejos) vamos al Santuario, a estar una horas al lado de nuestra Virgen de Setefilla, son unos 900 kilometros ida y vuelta, pero merece la pena y nos emocionamos solo con verla, a veces coincide que vamos los sábados y hay misa rociera, y eso ya es el colmo de la felicidad y de la emoción.