Historia Iglesia Vétero
Ruptura de la Unidad de la Iglesia Católica
Esta ruptura es el único acontecimiento histórico sucedido en el corazón mismo del catolicismo romano, donde un representativo número de obispos católicos romanos asumieron una posición rebelde con respecto a la doctrina de la infalibilidad y del primado de jurisdicción universal del Papa formulado en el Concilio Vaticano y en el año 1870, con la actitud profética de esos valerosos obispos nació la corriente Vétero.
"La institución papal creada para fomentar y mantener la unidad se convirtió con el tiempo en su mayor obstáculo, llegando a estar en medio de las escisiones de Oriente y Occidente, en el centro de las divisiones del s. XVI en la Europa cristiana y en el inicio del nacimiento de la Iglesia Vétero, tras las definiciones del Concilio Vaticano y, 1869-1870 sobre la jurisdicción universal del primado Romano y la infalibilidad de su magisterio extraordinario" (Art. Ecumenismo y catequesis" en el Nuevo Diccionario de Catequética. Vol. Y. Dir. V. Mamá. Pedrosa, San Pablo, Madrid, 1999, p. 723)
En tal sentido, los Véteros, no admiten el documento dogmático Pastor Aeternus aprobado por el Concilio Vaticano y, del 18 de Julio de 1870, que atribuye poder al Papa sobre todas las diócesis y todos los fieles. La auto-denominación de Véteros viene a consecuencia de afirmar como contraria a la tradición apostólica (atestiguada por la Escritura) que el sucesor de Pedro goza de infalibilidad y que sólo él tiene la potestad de regir sobre la Iglesia de Jesucristo.
La Iglesia Vétero: Forma parte de la Unión de las Iglesias de Utrecht, Holanda; que le confiere la sucesión apostólica, bajo la guía y cuidado del arzobispo de Utrecht, y es signatario de la declaración de Utrecht de septiembre 24 de 1889 donde define la
Posición teológica frente a la Iglesia Católica.(Op Cit, p. 523)
De las cuatro denominaciones católicas(Ortodoxa, Romana, Anglicana y Vétero), la Vétero es la más reciente, pues
Sus orígenes se remontan a los acontecimientos del Concilio Vaticano y. Mantenemos Comunión eclesial y eucarística con la Ortodoxa y la Iglesia Anglicana. II. Consecuentemente, la Iglesia Vétero es parte de la única Iglesia de Jesucristo, que tiene su realidad y continuidad histórica en las mismas raíces que las Iglesias Católicas Ortodoxa, Anglicana y Romana.
La Iglesia Vétero permanece fiel a las enseñanzas transmitidas por los apóstoles en la Sagrada Escritura, a las profesiones de fe definidas en los primeros concilios ecuménicos (Nicea, Constantinopla, Efeso, Calcedonia) y a la tradición viva de la Iglesia.
CONCLUSIONES:
La independencia de los católicos respecto de Roma y del Papa es legítima, en tanto el creyente se adhiere a una iglesia con libertad de conciencia y comparte su legado histó-rico-doctrinal.
Pasar por alto este derecho, ofende la presencia de toda Iglesia Católica Independiente de Roma (sea Ortodoxa o Anglicana o Vétero).
La independencia de los Véteros respecto de Roma y del Papa no debilita su fe; porque los católicos en general y las Iglesias Cristianas Evangélicas incluidas, profesamos que lo central del misterio de fe es proclamar un único Dios, que es Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Aceptar al Papa como infalible y primado universal de la iglesia de Cristo, no es dogma de fe, no es esencial para la fe. Lo cual no debe interpretarse como desconocimiento y demérito a la dimensión eclesial e histórica del papado.
La Iglesia Vétero cree, profesa y predica la fe recibida en herencia de los Apóstoles.(Credo Niceno-Constantinopolitano, Obra Nacional de la Buena Prensa, México, 1991, p. 288)
La Iglesia Vétero no rechaza ni discrimina a nadie. Acoge y da la bienvenida a todos sin tener en cuenta raza o lengua.
Profesamos que las enseñanzas Bíblicas que conducen a la unión con Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, deben distinguirse claramente de las normas, preceptos y disciplinas eclesiásticas; y que ninguna autoridad debe compeler a nadie a aceptar como verdad revelada lo que no contenga fundamento en las Sagradas Escrituras y en la sana tradición de la Iglesia.
Sus obispos son consagrados por obispos católicos con sucesión apostólica válida.(Op Cit, p. 523)
Sus sacerdotes son ordenados válidamente por un Obispo sucesor de los Apóstoles.
Nuestros Obispos, Sacerdotes y Diáconos pueden ser casados según la tradición de la Iglesia atestiguada por San Pablo en sus cartas a Timoteo (1 Tim 3, 1-7); (Tito 1, 5-6).
La ordenación de hombres casados esta sólidamente fundamentada en la Sagrada Escritura desde el principio de la Iglesia con la elección de Pedro, hombre casado para dirigir la primera Iglesia.
El celibato sacerdotal obligatorio (legislado en el Segundo Concilio Lateranense en 1139 bajo el pontificado del Papa Inocencio II) admitido por muchos es una tradición enraizado en la disciplina de la Iglesia, no en la Revelación.
No estamos en pugna ni competencia con ninguna Iglesia, porque todos somos llamados a ser apóstoles del único Maestro, Cristo Jesús. Practicamos y celebramos los siete sacramentos, signos y dadores del amor y perdón de Cristo Jesús. Confesamos que la comunión con el Cuerpo y Sangre de Cristo son prenda de vida eterna y remedio saludable para el perdón de los pecados, por tanto todo bautizado participa de la sagrada comunión.
Sin desconocer las palabras del Evangelio respecto al matrimonio, consideramos que la pareja divorciada, sobre todo cuando existe un amor real y auténtico puede iniciar una nueva vida con la bendición de la Iglesia.
Afirmamos que la pareja que vive según el plan de Dios establecido desde el principio es un verdadero matrimonio y no están desposeídos de la gracia de Dios; sin embargo, animamos a las parejas a buscar el reconocimiento legal de su unión y al compromiso cristiano significado en el sacramento del matrimonio. Amamos, honramos a María, como la Madre del Hijo de Dios.
Admiramos y honramos a hombres y mujeres que han alcanzado la santidad por su fidelidad a Cristo Jesús y su entrega al servicio del prójimo.
LOS VETEROS EN COLOMBIA
En Colombia estamos actuante hace varias décadas como grupos de sacerdotes amantes de la palabra y la enseñanza de nuestro señor Jesucristo, somos autónomos, no tenemos comunión, ni deseamos tenerla con ninguna religión, a no ser que sea para promulgar el verdadero evangelio de Cristo, estamos presto a colaborar con cualquier Cristiano sin importarnos su filiación religiosa, Cristo Fundamentó una Iglesia, no una Religión. Consideramos que la espiritualidad es con DIOS y no con las leyes, bien lo dijo el Cristo “Dad al Cesar lo que es del Cesar y a DIOS lo que es de DIOS" nos establecimos legalmente como Iglesia con el reconocimiento del gobierno Colombiano el día 19 del mes de Diciembre del año de nuestro señor Jesucristo 2003, cuando fuimos aceptados como ente jurídico bajo el nombre de IGLESIA MISIONEROS VETERO DE NUESTRA SEñORA DE LA ALEGRIA asignándonos por parte del ministerio del interior la personería jurídica no° 2265.
Legalmente constituido, continuamos nuestra misión de llevar la palabra de nuestro señor Jesucristo a todos los confines de la tierra.
Ruptura de la Unidad de la Iglesia Católica
Esta ruptura es el único acontecimiento histórico sucedido en el corazón mismo del catolicismo romano, donde un representativo número de obispos católicos romanos asumieron una posición rebelde con respecto a la doctrina de la infalibilidad y del primado de jurisdicción universal del Papa formulado en el Concilio Vaticano y en el año 1870, con la actitud profética de esos valerosos obispos nació la corriente Vétero.
"La institución papal creada para fomentar y mantener la unidad se convirtió con el tiempo en su mayor obstáculo, llegando a estar en medio de las escisiones de Oriente y Occidente, en el centro de las divisiones del s. XVI en la Europa cristiana y en el inicio del nacimiento de la Iglesia Vétero, tras las definiciones del Concilio Vaticano y, 1869-1870 sobre la jurisdicción universal del primado Romano y la infalibilidad de su magisterio extraordinario" (Art. Ecumenismo y catequesis" en el Nuevo Diccionario de Catequética. Vol. Y. Dir. V. Mamá. Pedrosa, San Pablo, Madrid, 1999, p. 723)
En tal sentido, los Véteros, no admiten el documento dogmático Pastor Aeternus aprobado por el Concilio Vaticano y, del 18 de Julio de 1870, que atribuye poder al Papa sobre todas las diócesis y todos los fieles. La auto-denominación de Véteros viene a consecuencia de afirmar como contraria a la tradición apostólica (atestiguada por la Escritura) que el sucesor de Pedro goza de infalibilidad y que sólo él tiene la potestad de regir sobre la Iglesia de Jesucristo.
La Iglesia Vétero: Forma parte de la Unión de las Iglesias de Utrecht, Holanda; que le confiere la sucesión apostólica, bajo la guía y cuidado del arzobispo de Utrecht, y es signatario de la declaración de Utrecht de septiembre 24 de 1889 donde define la
Posición teológica frente a la Iglesia Católica.(Op Cit, p. 523)
De las cuatro denominaciones católicas(Ortodoxa, Romana, Anglicana y Vétero), la Vétero es la más reciente, pues
Sus orígenes se remontan a los acontecimientos del Concilio Vaticano y. Mantenemos Comunión eclesial y eucarística con la Ortodoxa y la Iglesia Anglicana. II. Consecuentemente, la Iglesia Vétero es parte de la única Iglesia de Jesucristo, que tiene su realidad y continuidad histórica en las mismas raíces que las Iglesias Católicas Ortodoxa, Anglicana y Romana.
La Iglesia Vétero permanece fiel a las enseñanzas transmitidas por los apóstoles en la Sagrada Escritura, a las profesiones de fe definidas en los primeros concilios ecuménicos (Nicea, Constantinopla, Efeso, Calcedonia) y a la tradición viva de la Iglesia.
CONCLUSIONES:
La independencia de los católicos respecto de Roma y del Papa es legítima, en tanto el creyente se adhiere a una iglesia con libertad de conciencia y comparte su legado histó-rico-doctrinal.
Pasar por alto este derecho, ofende la presencia de toda Iglesia Católica Independiente de Roma (sea Ortodoxa o Anglicana o Vétero).
La independencia de los Véteros respecto de Roma y del Papa no debilita su fe; porque los católicos en general y las Iglesias Cristianas Evangélicas incluidas, profesamos que lo central del misterio de fe es proclamar un único Dios, que es Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Aceptar al Papa como infalible y primado universal de la iglesia de Cristo, no es dogma de fe, no es esencial para la fe. Lo cual no debe interpretarse como desconocimiento y demérito a la dimensión eclesial e histórica del papado.
La Iglesia Vétero cree, profesa y predica la fe recibida en herencia de los Apóstoles.(Credo Niceno-Constantinopolitano, Obra Nacional de la Buena Prensa, México, 1991, p. 288)
La Iglesia Vétero no rechaza ni discrimina a nadie. Acoge y da la bienvenida a todos sin tener en cuenta raza o lengua.
Profesamos que las enseñanzas Bíblicas que conducen a la unión con Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, deben distinguirse claramente de las normas, preceptos y disciplinas eclesiásticas; y que ninguna autoridad debe compeler a nadie a aceptar como verdad revelada lo que no contenga fundamento en las Sagradas Escrituras y en la sana tradición de la Iglesia.
Sus obispos son consagrados por obispos católicos con sucesión apostólica válida.(Op Cit, p. 523)
Sus sacerdotes son ordenados válidamente por un Obispo sucesor de los Apóstoles.
Nuestros Obispos, Sacerdotes y Diáconos pueden ser casados según la tradición de la Iglesia atestiguada por San Pablo en sus cartas a Timoteo (1 Tim 3, 1-7); (Tito 1, 5-6).
La ordenación de hombres casados esta sólidamente fundamentada en la Sagrada Escritura desde el principio de la Iglesia con la elección de Pedro, hombre casado para dirigir la primera Iglesia.
El celibato sacerdotal obligatorio (legislado en el Segundo Concilio Lateranense en 1139 bajo el pontificado del Papa Inocencio II) admitido por muchos es una tradición enraizado en la disciplina de la Iglesia, no en la Revelación.
No estamos en pugna ni competencia con ninguna Iglesia, porque todos somos llamados a ser apóstoles del único Maestro, Cristo Jesús. Practicamos y celebramos los siete sacramentos, signos y dadores del amor y perdón de Cristo Jesús. Confesamos que la comunión con el Cuerpo y Sangre de Cristo son prenda de vida eterna y remedio saludable para el perdón de los pecados, por tanto todo bautizado participa de la sagrada comunión.
Sin desconocer las palabras del Evangelio respecto al matrimonio, consideramos que la pareja divorciada, sobre todo cuando existe un amor real y auténtico puede iniciar una nueva vida con la bendición de la Iglesia.
Afirmamos que la pareja que vive según el plan de Dios establecido desde el principio es un verdadero matrimonio y no están desposeídos de la gracia de Dios; sin embargo, animamos a las parejas a buscar el reconocimiento legal de su unión y al compromiso cristiano significado en el sacramento del matrimonio. Amamos, honramos a María, como la Madre del Hijo de Dios.
Admiramos y honramos a hombres y mujeres que han alcanzado la santidad por su fidelidad a Cristo Jesús y su entrega al servicio del prójimo.
LOS VETEROS EN COLOMBIA
En Colombia estamos actuante hace varias décadas como grupos de sacerdotes amantes de la palabra y la enseñanza de nuestro señor Jesucristo, somos autónomos, no tenemos comunión, ni deseamos tenerla con ninguna religión, a no ser que sea para promulgar el verdadero evangelio de Cristo, estamos presto a colaborar con cualquier Cristiano sin importarnos su filiación religiosa, Cristo Fundamentó una Iglesia, no una Religión. Consideramos que la espiritualidad es con DIOS y no con las leyes, bien lo dijo el Cristo “Dad al Cesar lo que es del Cesar y a DIOS lo que es de DIOS" nos establecimos legalmente como Iglesia con el reconocimiento del gobierno Colombiano el día 19 del mes de Diciembre del año de nuestro señor Jesucristo 2003, cuando fuimos aceptados como ente jurídico bajo el nombre de IGLESIA MISIONEROS VETERO DE NUESTRA SEñORA DE LA ALEGRIA asignándonos por parte del ministerio del interior la personería jurídica no° 2265.
Legalmente constituido, continuamos nuestra misión de llevar la palabra de nuestro señor Jesucristo a todos los confines de la tierra.