
Esta estación tiene algo que nos fascina a todos que la visitamos. Es inimaginable ver algo tan grandioso en plena naturalez salvaje. Es una maravilla. Deseo verla restaurada y que recobre todo su esplendor. Imagino cuanto han debido sufrir todos los habitantes del valle de Canfranc viendo su deterioro y constante dejación por parte de Renfe o de la Administración. Tengo constancia de la lucha infatigable de su anterior alcalde por verla restaurada. Imagino habran hasta llorado cuando se firmaran recientemente los acuerdos. Yo, siempre lo he dicho, que se la quede quien sea, aunque sea un multimillonario, pero que la arreglen ya. Lo demás me tiene sin cuidado.