Esta imagen es un testimonio de la cruda realidad que Muro de Bellos comparte con otros muchos bonitos pueblos del Alto Aragón.
Víctima de la emigración y el abandono de las zonas agrícolas durante los años 60 y 70, este pueblo que queda situado en la cúspide de un monte está actualmente deshabitado, y como consecuencia, el paso de los años ha hecho mella en muchas de sus construcciones.
Actualmente, sólo se ven por sus rincones las cabras que suben a pastar a este enclave, y emplean aquellas casas que todavía siguen en pie como guaridas.
Juan Ramón Lascorz. Autor de la foto.
Víctima de la emigración y el abandono de las zonas agrícolas durante los años 60 y 70, este pueblo que queda situado en la cúspide de un monte está actualmente deshabitado, y como consecuencia, el paso de los años ha hecho mella en muchas de sus construcciones.
Actualmente, sólo se ven por sus rincones las cabras que suben a pastar a este enclave, y emplean aquellas casas que todavía siguen en pie como guaridas.
Juan Ramón Lascorz. Autor de la foto.