Bella parroquial, originaria del siglo XII.
PLANTA: Se trata de una nave rectangular con cabecera constituida por presbiterio y
ábside de tambor. Cúbrese con
bóveda de cañón sobre la nave y presbiterio, siendo de
horno en el ábside, en todos casos partiendo de imposta. Es notable el
altar, cuyo tablero se apoya en
columnas dobles con
capiteles de decorado vegetal y geométrico. Al interior, sus muros estaban cubiertos con pinturas, pero han sido trasladadas al
Museo Diocesano de
Jaca. Apoyada en el paramento septentrional, hay una esbelta
torre de cuatro cuerpos delimitados por impostas al exterior, que solo dispone de
ventanas en el cuerpo superior, al haber sido tapiadas el resto, y que se cubre con un
tejado a dos vertientes. El ábside no dispone al exterior de ningun ornato, abriédose en su centro un
ventanal de
arco de medio punto doblemente abocinado y estando apoyada su cornisa en
canecillos.
PORTADA: Al pie de la nave y cubierta por un atrio de postrera construcción, se constituye de tres arquivoltas, siendo la central abocelada y las que la flanquean de dovelas, y apoyadas todas en pilastras rematadas en imposta. Su tímpano contiene en el centro el relieve de un crismón trinitario, acompañado a sus costados por diversos animales, como un
león, lo que parece un jabalí y un pájaro.
Las construcciones respetan el entorno donde se enclava el
pueblo,
casas de
piedra en buen estado (casi todas restauradas). Asi
Navasa en el año 2000, recibio el
premio "pueblo limpio" entre los pertenecientes a la comarca de la Jacetania.