El conjunto de
edificios de
San Cosme y San Damián se encuentran dispuestos en torno a una
plaza rectangular, apoyados en su parte norte en el muro de conglomerado calizo propio de la zona. Adosada al
santuario se encuentra la hospedería de peregrinos donde se hallaba "el cuarto del peso" con una gran balanza suspendida del techo, y destinada a pesar a los sanados por los
Santos, los cuales debían entregar al santuario, en agradecimiento, su peso en trigo.
Datos obtenidos del panel informativo en el
sendero.