Una de las obras barrocas más importantes de la comarca, inició su construcción en el siglo XVIII. Se edificó sobre los restos de la antigua
iglesia gótica de
Santa María del Pla de principios del siglo XIV y de dimensiones más reducidas.
Al hacer un templo mayor se redujo las dimensiones de la
plaza de Dalt o Santa María situada en el lado norte.
La
parroquia perteneció a la Diócesis de Tortosa hasta 1957, año en el que pasó a formar parte de la de
Zaragoza.
El maestro de obras fue Francisco de Ibargüens y fue consagrada en 1710.
Construcción de sillería con planta de
salón con tres naves de la misma altura. En el exterior destaca la
torre y la
fachada con tres
puertas de las que sobresalen
columnas salomónicas e impresionantes clavos de forja en las puertas. La torre del
campanario quedó inacabada.
Durante la guerra civil el
edificio fue quemado y quedó en mal estado hasta que fue reconstruida. El año 2001 fue declarado Bien de Interés Cultural.
La iglesia de Nuestra Señora de la Asunción es uno de los múltiples ejemplos que hay en la Comarca del Matarraña en torno a edificaciones barrocas del siglo XVII y XVIII.