La Iglesia Parroquial de San Miguel es un templo edificado en la primera mitad del siglo XV, construido en sillería.
A pesar de que no cuenta con campanario, su aspecto exterior resulta monumental, destacando en su exterior la portada, compuesta por una sobria decoración de estilo gótico levantino en donde aparecen dragones, leones y sirenas; sobre la portada se puede observar un rosetón de grandes dimensiones.