Soy cutandina, no de nacimiento, pero sí de corazón. Por lo que al ver esta
foto se me ponen los pelos de punta y cientos de recuerdos se me pasan por la cabeza.
Esa
torre, ese
reloj que en ella sostiene, es aquel que suena cada vez pasan las horas, cuántos recuerdos...
Y que me dices de ese
balcón desde el que todos los años se pregona el comienzo de la
fiesta grande, olé... Que bonitos recuerdos y que bien nos lo hemos pasado los cutandinos. Y este año más.
- Que ganas tengo de estar allí de
... (ver texto completo)