En plena Edad Media, el
castillo y el territorio de
Monroyo (Mont-roig) fueron ocupados por el rey Alfonso I el Batallador hacia el año 1132 pero no se conquistaron definitivamente a los árabes hasta 1169. En 1157 los términos de Monroyo quedaron comprendidos en los del castillo de Alcañiz. En el año 1185 el rey Alfonso II el Casto (conocido también como el Trobador), desde
Zaragoza, concedió el castillo de Monroyo al Arzobispo y a la Seu de
Tarragona. Sin embargo la corona recuperó posteriormente el dominio y Pedro II el Católico lo cedió a la orden de Calatrava con el encargo de reconstruir y poblar la fortaleza y las tierras vecinas y de hacer de aquella un baluarte de la cristiandad. El 3 de abril de 1209 los caballeros de Calatrava tomaron posesión de la fortaleza.
Datos procedentes de la web del
ayuntamiento: http://www. monroyo. es/el-
pueblo-2/
historia-local/