Muralla.
La localidad de
Puertomingalvo fue reconquistada en 1181 por Alfonso II el Casto a los almohades, pasando a formar parte de la Corona de
Aragón. Posteriormente Pedro II la donó, junto a
Linares de Mora, al obispo de
Zaragoza, momento a partir del cual Puertomingalvo paso a pertenecer al obispado de Zaragoza durante más de seiscientos años. A partir de 1202 el Castro fue creciendo hasta convertirse en Villa. En 1261 el obispo zaragozano Arnold Peralta le otorgó su carta de población, reconociendo a la comunidad como tal.
Posteriormente, el
pueblo fue creciendo desde el
castillo por la ladera del espolón, creando se un perímetro
amurallado. De sus
murallas se conservan varios lienzos, algunos incluso de raigambre andalusí, en consonancia con el origen musulmán de la localidad. Los portales servían para regular el acceso a la Villa y de ellos se conservan el Portal Alto o Portal de
San Antonio (s. XIV) y el Portal Bajo o Portalico (s. XII-XIII) mientras que el portal de la Umbría y el de Onda han desaparecido.
Puertomingalvo es una pequeña localidad (pero auténtica joya histórica y patrimonial), que cuenta con 109 habitantes (año 2019) y pertenece a la Red de los
Pueblos más Bonitos de
España. Está enclavado en un precioso entorno natural, en pleno
Parque Cultural del Maestrazgo, al noreste de la comarca de Gúdar-Javalambre.
Un sitio muy tranquilo, ideal para relajarse.
Su
historia se remonta a tiempos de los íberos. Después pasaron por este lugar los
romanos, aunque siglos después el poderío musulmán también estuvo presente por estas tierras.
Será en 1181 cuando Puertomingalvo fue reconquistado por Alfonso II el Casto a los almohades, pasando a formar parte de la Corona de Aragón. Pasó al obispo de Zaragoza, Don Raimundo de Castrocol cuando fue donado en 1202 por el rey aragonés Pedro II. Hasta principios del siglo XIX Puertomingalvo siguió perteneciendo al Cabildo y Obispado de Zaragoza.
El núcleo urbano se asienta sobre un promontorio rocoso presidido por el Castillo de Puertomingalvo. El conjunto de Puertomingalvo está formado por una complicada red de
calles estrechas en las que se levantan bellos ejemplos de
arquitectura medieval y popular.