Mayra: en verdad lo tienes muy dificil.A no ser que uno sea miembro de la realeza o de la rancia nobleza en que a través de los siglos han venido conservando de sus antepasados cumplida memoria escrita(o al menos de lo que más les interesaba), para el común de los mortales es muy dificil llegar a conocer noicias de sus ancentros más allá de cuatro o cinco generaciones anteriores. Pero además hay que tener en cuenta que nuestros antepasados no se constriñen a los que tuvieron solo nuestro primer apellido, que en el caso de España se trasmite por vía paterna, sino que el colectivo abarca a todos aquellos provenientes de la propia vía paterna que tuvieron otros, amén de los correspondientes a los antepasados de la vía materna. Es decir nos encontramos ante un cúmolo de apellidos que aumentan en proporción geométrica según nos vamos remontando a generaciones pretéritas. Y en definitiva, ¿nos sería satisfactorio conocer todo lo referente a nuestros múltiples antepasados?:Habría casos en que nos pudiéramos sentir orgullosos de algunos o muchos de ellos, pero también podríamos encontrarnos con otros de cuyos actos podríamos avergonzarnos profundamente.