La ciudad es un conjunto fortificado rodeado de una Muralla de 4 Km., construida entre los siglos XIII Y XVI y conservada prácticamente en su totalidad. Flanqueada por sus torreones defensivos el Castillo Mayor y dos fortificaciones más pequeñas San Cristobal y el Castillo de la Judería, el recinto amurallado está cerrado por dos monumentales puertas. la Puerta Alta y la Puerta Baja, situadas a ámbos extremos de la Calle Mayor,