Todavía recuerdo hoy, los angustiosos dias del incendio de la sierra de Petilla, mi hijo José Vicente, estaba pasando las vacaciones como todos los años con mis padres.Habia que abandonar el pueblo, el fuego se acercaba y José Vicente lloraba porque su abuelo no queria marchar. Yo estaba en Valencia cuando mi madre me llamó , para decirme lo que ocurria.Fuerón unos de los peores dias de mi vida.¡ Que desolación cuando fuimos en agosto a pasar las vacaciones y todo nuestro paisaje estaba teñido de ... (ver texto completo)