DESCRIPCIÓN DEL
PUEBLO
El
caserío arranca al pie de la
carretera, en la margen derecha del
río Jiloca, y se encarama sobre un espolón, dominando el
valle de ubérrima vega. Cuentan que antaño el pueblo estuvo rodeado de
murallas de
piedra, y aún queda el testimonio en pie, con dos
puertas góticas en
arco apuntado y otros tantos
torreones.
Montón se sitúa entre
Fuentes de Jiloca y
Villafeliche, en la carretera que va de Daroca a Calatayud, siguiendo el curso del río Jiloca. Las
calles y
plazas tienen cierto sabor y pintoresquismo. Cuenta con, al menos tres plazas: la Vieja, la Nueva y la de la
Iglesia de reciente remodelación.
LA IGLESIA PARROQUIAL
La iglesia parroquial está dedicada a la Purísima Concepción y es
gótica, de finales del siglo XV. Tiene
torre a los pies, de planta cuadrada, con el cuerpo inferior mudéjar, y el superior, que es el
campanario, con las
esquinas achaflanadas. Sobre la cubierta del
edificio se alza una
cúpula octogonal, con linterna. El interior del templo presenta planta rectangular y
ábside poligonal, sin crucero. Aunque sólo constada de una nave, da la sensación de disponer de tres, dado que las
capillas, bastante profundas, se comunican ente sí. Al parecer, se abrieron en el siglo XVI, en sustitución de las primitivas, situadas entre los contrafuertes.
La cubierta es de
bóveda de crucería estrellada, tanto por lo que respecta a la nave como a las capillas. Sobre bóveda también de crucería se alza el
coro, a los pies. En el siglo XVI se introdujeron algunas reformas, y la iglesia se decoró con
columnas toscanas y una cornisa corrida, de estilo barroco, y se cambió la cubierta de las capillas del Rosario y de
San Agustín por una cúpula sobre pechinas y linterna. Los
retablos son de los siglos XVI al XVIII.
El
órgano de la iglesia fue ajustado por José Sesma, en 1679, en tanto que Francisco Franco de Miedes se encargó de la caja y de la barandilla del coro. Hubo necesidad de levantar la
capilla de la Soledad para acomodar allí el órgano, al que en 1703 se le añadieron nuevos registros, tales como clarines, bajoncillos, suspensión y dulzainas de bronce.
LAS
ERMITAS DE LA LOCALIDAD
En cuanto las ermitas se refiere, los vecinos señalan que las levantaron para marcar los límites del termino municipal, de manera que la de
Santa Eulalia se alza al este de la población; la de San Andrés, hoy desaparecida, al norte; la de San Fabián, también desaparecida en la actualidad, al oeste, y la de Nuestra señora del Pilar, al sur. No se tiene noticia, en cambio, de la de San Sebastíán, aunque bien pudiera ser que esta advocación fuera conjunta con la de San Andrés, como sucede en otros
pueblos.