Es un pueblo que se ha desarrollado muy bien, ahora es cierto que debería dejar de crecer, aunque el efecto área de zaragoza quizás estropee el encanto del pueblo. No obsntante, los servicios son muy completos. Las atenciones que recibimos mi esposa y yo al llegar al pueblo fueron magníficas. La gente es muy familiar y acogedora. Nuestra hija está en la guardería municipal, mejor atendida que en muchas de las guarderías de zaragoza por las que nos pedían un ojo de la cara. Se vive muy bien porque todo está muy cerca, y porque la atención que nos han prestado tanto las secretarias del ayuntamiento, como los responsables políticos debería ser un ejemplo a instaurar en el resto de aragón y de españa. Estamos encantados, hemos hecho una compra de vivienda y de vida extraordinaria.