Es el
molino de viento del tío Juaquinillo. Recuerdo que en la
veleta que le servía para buscar la orientación del viento ponía Míchigan, supongo que sería la marca o quizá indicaba la procedencia, no lo sé. Con él sacaba el
agua, que reunía en una balsa a nivel más alto, para regar esa
finca de la Canaleja. Crispín Mínguez.