No hay porque dar las gracias, lo que pasa es que por desgracia al ser mucho mas joven que tu ya no me acuerdo de vosotras sin embargo a tu madre casi tos los domingos que voy a comer a casa de mi madre la veo en la ventana parece que no pasa el tiempo porque siempre me acuerdo de tu madre asomada a la ventana un saludo de un vecino