¡Qué bien hicisteis trasplantando el noble Olivo! seguramente le salvasteis la vida. Os lo dice un enamorado de los Olivos y de esas Tierras, que como Guardia Civil en el año 1971-2 pateó algunas de ellas. De la Comandancia de Inca salí hacia la estación, encontrarme allí con otros dos compañeros y dirgirnos a Petra, nuestro destino. ¡Qúe tiempos! ¡Qué cosas!. Un saludo de Germán desde Torrejón de ardoz (MADRID).