También nos topamos en su interior con decenas de preciosas
vidrieras que escenifican distintos acontecimientos de carácter religioso. Así, encontramos vidrieras con alusiones a la
Virgen María, representaciones de ángeles y arcángeles o escenas más próximas a la
historia local, como las que representan la aparición de la Virgen de la
Candelaria a los guanches. A su vez, hallamos decenas de pinturas murales, obra de José Aguiar García. Se encuentran repartidas por toda la Basílica y, naturalmente, todas ellas están cargadas de referencias al cristianismo. En sus alrededores, a parte de las mencionadas
estatuas en honor a los guanches y la extensa y popular
plaza a los pies de la Basílica, nos encontramos con una zona de bastante afluencia; un lugar siempre en movimiento, donde
restaurantes,
tiendas,
cafeterías y
terrazas se suceden formando un todo un
mosaico comercial.